Pese a los anuncios y esfuerzos realizados por el Gobierno nacional, algunos productos de primera necesidad brillan por su ausencia y cuesta mucho adquirirlos
«Cuando me enteré de que había llegado la Harina Pan me vine corriendo, desde comienzo de diciembre no había conseguido y aquella vez hice una cola como de dos horas para poderla comprar; gracias a Dios me estoy llevando suficiente y espero que me dure al menos dos meses. Igualito no conseguí ni mantequilla, ni azúcar, así que sigo en la búsqueda».
Así se expresó Berta Gamboa, al salir -este sábado en horas de la tarde- de una reconocida cadena de supermercados del Estado, ubicada en el en sector El Samán de Guarenas, municipio Plaza del estado Miranda, donde acudió al enterarse que que había sido recién abastecida con la popular harina de maíz precocidad.
Sin embargo, este importante alimento prometía agotarse en pocas horas, pues la noticia «voló como el viento», por lo que rápidamente fueron llegando los compradores que salían con bolsas cargadas de los populares paqueticos amarillos, que estaban siendo distribuidos a cinco por personas; haciendo que familias enteras se acercaran para adquirir cada uno la porciones que les correspondía.
«Ni azúcar o mantequilla»
La azúcar y la mantequilla son otra historia. Según reportaron algunos consumidores «hace semanas» que no comprar estos rubros por los medios regulares o sin tener que acudir a la economía informal que los expende a sobreprecio. Sobretodo el derivado de la caña, cuyo precio regulado es de 6,10 bolívares y los buhoneros los ofrecen a 15 bolívares el kilogramo.
La margarina con sal, que es regularmente la más consumida, tiene una presencia «intermitente» en los anaqueles. Durante el pasado jueves podía ser adquirida en el mercado de El Samán a 12,60 bolívares el medio kilo, pero este sábado ya no había.
En una distribuidora de quesos ubicada en la Calle Ricauti del centro de esta ciudad mirandina, tenía disponibles latas de mantequilla marca Los Andes a 40 bolívares, pero según un vendedor quien prefirió no revelar su identidad, esta no es muy bien recibida y poco buscada por los compradores.
Mientras que los pocos comerciantes de calle venden víveres y tenían en su poder el tan buscado producto, lo ofrecían con un valor de 22 bolívares el medio kilo.
«De conseguirlo se hace, pero hay que dar mil vuelta y hacer mil maromas para lograrlo. La idea y lo correcto sería que al llegar a un abasto, se encontrara lo que se necesita sin tanto esfuerzo. No me sorprendería si el día de mañana nos tocara fabricarlos a nosotros mismos, si es que se consiguen los ingredientes para ello», comentó Susana Rodriguez, mientras salía de un local en Trapichito, donde tampoco encontró el alimento que buscaba.
Otros productos
El pollo y el papel higiénico también están difíciles de localizar. En una carnicería ubicada en la Calle Los Comercios del centro, venden sólo una ave por persona con un precio regulado de 15,61 bolívares el kilogramo. Mientras que en el supermercado del Gobierno no había, porque «el camión se accidentó» por lo que comentó uno de sus empleados.
La harina de trigo, el aceite de maíz, el detergente para lavar los platos y entre otros artículos también son «difíciles de conseguír». Los consumidores esperan que esta situación se resuelva y comiencen a adquirir «con normalidad otra vez».
Escasez del 2012
Según un reciente informe realizado por el Banco Central de Venezuela, donde se midió el nivel de escasez de 33 productos en el Area metropolitana de Caracas, arrojó que alimentos como la harina de maíz precocidad, pollo, arroz, leche, queso, pollo, aceite, margarina y azúcar, registraron indices de escasez entre significativos y graves.
En aceite de girasol durante abril tuvo una ausencia del 100%. Mientras que la harina de maíz cerró diciembre con una escasez superior al 43%.
Anabel Barrios Díaz / abarrios@diariolavoz.net