Alrededor de 500 familias que habitan en el mencionado complejo habitacional construido por el Gobierno, en el sector que lleva el mismo nombre y se encuentra ubicado en la parroquia Petare, temen volver a quedar damnificados ante el riesgo latente que registra la montaña a causa de una falla geológica
“Cuando vi llegar a Protección Civil, lo primero que vino a mi mente fue que otra vez quedaría damnificada”, esas fueron las palabras de Zuleima Silva, habitantes de la terraza 12 del Complejo Habitacional “El Morro”, cuando en horas de la madrugada del martes debieron desalojar de emergencia los apartamentos por la rotura de una tubería matriz, ubicada a tan sólo cuatro metros del edificio donde vive.
El mismo temor expresado por la mujer lo sienten alrededor de 500 familias que residen en el mencionado urbanismo, que fue edificado por el Gobierno para darle una solución a la crisis de viviendas desatada con las lluvias del año 2010.
Y es que la montaña sobre la cual fueron cimentados los inmuebles presenta una falla geológica activa, lo cual se ve reflejado en el agrietamiento progresivo del suelo así como en los continuos deslizamientos de tierra.
Vecinos del lugar afirman que antes de iniciar el proyecto el Ejecutivo Nacional, no hizo entrega de los estudios de suelo que verificaran que el terreno fuera apto para una obra de ese tipo, por lo que algunos creen que dicha evaluación nunca se realizó.
A un año de haber recibido la vivienda, los beneficiarios sufren las consecuencias de una construcción que pareciera no haber sido debidamente planificada y donde las grietas en el asfalto se han convertido en el recordatorio para quienes allí residen que detrás de un fachada bonita se esconde un “grave problema” que los podría dejar en la calle nuevamente.
“Esto es una bomba de tiempo, la urbanización carece de un buen sistema de canalización de agua, la cual termina en el terreno socavándolo aún mas”, expresó Rosa Vegas, habitante del lugar.
Ante el riesgo latente los afectados piden al Ministerio de Vivienda y Hábitat, ente encargado de la obra a que se agilicen los trabajos para resolver la problemática que les aqueja y que no ocurra una tragedia similar a la de Nueva Tacagua.
Filtraciones
Pese a asegurar sentirse felices en sus apartamentos ya que representan una mejora en su calidad de vida, sin embargo se quejan que en menos de una año la mayoría de las viviendas ya presentan filtraciones en paredes y baños por desperfectos en el sistema de tuberías.
Tal es el caso, de Andrea Rivas de 72 años, quién vive con sus hijos y nietos en el apartamento que le asignó el Gobierno, tras haber perdido su vivienda en el sector El Tamarindo en la ciudad de Guarenas, estado Miranda.
La mujer relató que cuando entró por primera vez en su nueva casa y abrió las llaves de agua, el líquido salió disparado inundando el inmueble. “Un baño me lo dieron todo destartalado y el otro desde que llegue esta inutilizable porque no tiene desagüe”.
De igual forma, aseguraron que cuando llueve el agua se mete dentro de los edificios y corre por las paredes afectando la estructura. “El líquido sale hasta por los enchufes de los pasillos”, manifestó Jenny Colina.
Los afectados aclararon que no responsabilizan de ello al Presidente Chávez, sino a la empresa encargada de la obra que no cumplió con el trabajo. “Cuando llegamos les notificamos los problemas que tenían los apartamentos nos dijeron que lo iban a solucionar, pero no cumplieron y se fueron así sin más”, reclamó Vegas.
Sin agua
Tras la ruptura de una tubería matriz en matriz de veinticuatro pulgadas habitantes del El Morro, así como otros 300 sectores de la parroquia Petare, se quedaron sin servicio de agua.
A pesar de que funcionarios de Hidrocapital y el Instituto Autónomo de Aguas de Sucre (IMAS) trabajan para la restitución del servicio, la inestabilidad del terreno ha dificultado la tarea razón por la cual la reparación podría tardar varios días.
En este sentido, los habitantes afectados solicitaron que mientras dure la contingencia sean enviadas cisternas de agua para abastecer los hogares.
“Como fue una emergencia no tuvimos tiempo de prepararnos, no tenemos ni una gota de agua”, dijo Zuleima Silva.
Problema de contaminación
La contaminación que produce un bote de aguas negras en la Terraza 12 del Complejo Habitacional El Morro, se ha convertido en un dolor de cabeza para los habitantes, quienes solicitaron la presencia del Ministerio de Vivienda y Hábitat, para resolver la problemática.
Y es que, aseguran que una torrentera en la que desembocan las cloacas provenientes de la Terraza 8, presenta una grieta por la que se escapa el líquido contaminado el cual se desborda por toda la vía.
Aseguran que el canal fue mal construido por lo que exigen su pronta reparación ya que ello representa un riesgo para la salud de quienes allí habitan.