Este viernes se abre la cuarta década del baloncesto espectáculo, con los juegos Marinos-Toros y Guaiqueríes-Gaiteros
El clásico llamado a juego marca esta noche a las 8, en Puerto La Cruz y La Asunción, el inicio de la cuarta década del espectáculo. Liga Especial primero, Conabaes después y finalmente Liga Profesional, el baloncesto venezolano inicia su temporada 2013 en medio de excelentes augurios, dado el esfuerzo realizado por las directivos de los diez equipos para montar elencos capaces de ser altamente competitivos.
Una dura campaña espera a Marinos, Toros, Guaiqueríes, Gaiteros, Trotamundos, Panteras, Gigantes, Bucaneros, Cocodrilos y Guaros. Son 54 partidos en 18 semanas, que exigirán, además del indispensable bagaje técnico-táctica, muy buena preparación física y consistencia en el juego. Este año se registra el inicio más tempranero de la historia, con el objetivo que la selección nacional se prepare con suficiente tiempo para el pre mundial que se jugará en Caracas a partir del 31 de agosto.
Para enfrentar el duro calendario, además del lapso preparatorio -la mayoría comenzó a fines de 2012- incluyó topes con criollos e importados, y sobre todo una búsqueda minuciosa para traer del extranjero jugadores capaces de integrarse y reforzar puntos clave. El camino irá diciendo hasta qué punto se logra la «química» indispensable para ganar, pero el trabajo hecho es garantía para la calidad de los encuentros.
Cabe señalar que se mantiene la cuota de tres importados por equipo, pudiendo todos estar en la cancha simultáneamente. Una disposición de discutible efecto para el desarrollo del talento criollo -que suele aportar más estabilidad, mayor sentido al espectáculo pues el aficionado lo encuentra «más suyo»-, pero aprobado por todos los equipos y parte de la crítica. De otra parte, es una manera de nivelar -en cierta forma- a los planteles con base criolla más débil, si bien habría de verse por qué, en tantos años, todavía hay algunos que no consiguen suficiente material humano. Pero ese es otro tema.
La inauguración
Marinos parte como favorito. Y por su condición de campeón tendrá la responsabilidad del partido y la ceremonia de inauguracion, recibiendo a Toros en la llamada «Caldera» de Puerto La Cruz. Su rival es un elenco en su mayoría joven, que por ello dependerá en buena parte de lo que haga su plantel de importados, si bien la llegada de Julio Toro al banco aragüeño es garantía de lucha, de baloncesto bien jugado y agresivo.
En La Asunción también se jugará esta noche, con Guaiqueríes recibiendo a Gaiteros del Zulia. Dos viejos rivales del baloncesto que siempre ofrecen emociones.
Para el sábado están programados los encuentros Trotamundos-Panteras, en Valencia, Cocodrilos-Guaros, en Caracas, así como la segunda edición de los juegos inaugurales. Y el domingo repetirán Cocodrilos-Guaros, mientras Bucaneros de La Guaira recibirá a Gigantes de Guayana.
La seguridad
La LPB está exigiendo a los equipos garantizar la mayor seguridad para los aficionados y, en general, para el espectáculo. Así, tanto jugadores como público están expuestos a sanciones, pues hay la disposición de cortar de plano cuanto pueda perjudicar el normal desarrollo. Faltas técnicas a los aficionados con perjuicio directo para sus equipos, expulsión y prohibición de acceso a los revoltosos que suelen ser pocos pero altamente perjudiciales, irán de la mano con los castigos a jugadores y técnicos que, con actitudes antideportivas, solivianten a los aficionados.
Refuerzos foráneos
Además de los jugadores, otro personal extranjero vendrá a reforzar el baloncesto venezolano. Se trata de seis técnicos (de Puerto Rico, Argentina y Estados Unidos) y por lo menos dos árbitros (permanentemente, pero serán rotados), que no solo representan aporte a la calidad del baloncesto, pues su presencia permitirá intercambios con sus pares venezolanos para beneficio de la disciplina. AN