Durante la mañana se retrasaron 61 vuelos procedentes de Pekín
CHINA. Los residentes del norte de China luchaban contra una asfixiante nube de contaminación que alcanzó niveles extremos este martes, mientras que los habitantes de Pekín sufrían la fuerte polución por cuarta vez este invierno.
El Índice de Calidad del Aire (AQI) de la embajada estadounidense en Pekín, que sirve de referencia a muchos habitantes de China, se situó este martes a las 17H00, hora local, en 457, después de haber llegado a 517 a las 06H00, hora local.
El AQI es «malsano» por encima de 150, «peligroso» al superar los 300 y «fuera de índice» sobre 500.
Sin embargo, el Centro Municipal de Control Medioambiental de Pekín lo situó en 406, indicando que el aire de la capital estaba «muy contaminado».
Este martes, la visibilidad se reducía a 200 metros en algunas zonas de la capital, donde peatones con mascarillas recorrieron su camino a través de una turbia niebla, a pesar de que las autoridades aconsejaron quedarse en casa, a no ser que fuera absolutamente necesario salir.
Durante la mañana, se retrasaron 61 vuelos procedentes de Pekín.
Después del récord alcanzado el 13 de enero, se trata de la cuarta vez desde el comienzo del invierno que la capital sufre este humo tóxico, mezcla de contaminación y una niebla muy densa en el norte de China.
En el aeropuerto de Zhengzhou, en la provincia de Henan (este), más de 100 vuelos fueron retrasados o cancelados, informó la cadena de televisión estatal China Central Televisión (CCTV), quien añadió que la niebla durará hasta el jueves.
En la provincia de Shandong (este), casi 2.000 pasajeros quedaron atrapados en el principal aeropuerto de Qingdao, después de su cierre y la cancelación de 20 vuelos cuando la visibilidad se redujo a 100 metros, según la agencia oficial Xinhua.
Ante el aumento de la niebla tóxica, muchos residentes se apresuraron a comprar mascarillas y purificadores de aire y los doctores de los dos principales hospitales de Pekín aseguraron que el número de pacientes con problemas respiratorios aumentó considerablemente.
Los problemas de contaminación chinos se atribuyen a la rápida urbanización del país y a su desarrollo económico.
Pero los expertos plantearon dudas sobre la voluntad y la capacidad de China para abordar el uso del automóvil y el carbón, que se consideran como causas fundamentales de este fenómeno.
AFP