“Un CNE inválido, vacío, con su periodo vencido y sin nuevas condiciones electorales va a hacer gravísimo daño a la democracia venezolana” sentenció el presidente de la Fundación Arturo Úslar Pietri (FAUP), Antonio Ecarri, durante la solicitud de audiencia formal con rectores del Consejo Nacional Electoral (CNE) para exhortar sobre inicio del proceso de designación de los nuevos rectores electorales.
“Hoy estamos aquí para reunirnos con los propios rectores para que sean ellos mismos los que promueven la escogencia ante la Asamblea Nacional de los próximos encargados del órgano electoral. Por un CNE equitativo pasa la paz de Venezuela, para no repetir episodios como el 4 de febrero de 1992. Por un CNE legítimo pasa la tranquilidad de los venezolanos”.
Desde la sede principal del CNE, Ecarri explicó que el 28 de abril se vence el periodo a los tres rectores postulados por la sociedad civil: Tibisay Lucena, Sandra Oblitas y Vicente Díaz. Indicó que el proceso de selección que inicia con la conformación, desde la Asamblea Nacional, del Comité de Postulaciones Electorales tiene una duración de 80 días continuos, según lo establecido en la ley. También exhortó a las rectoras Lucena y Oblitas para que anuncien su pretensión de postularse o no a una reelección en el cargo, como ya lo hizo el rector Vicente Díaz.
“Estamos en el momento de definir postulaciones, nombres y no queremos continuidad administrativa, sino un nuevo CNE. Nuestro mensaje también va dirigido al presidente de la AN, Diosdado Cabello, y a los jefes de las fracciones parlamentarias. Luego del 28 de abril esta sede puede quedar vacía si se aplica el mismo criterio utilizado con los magistrados del Tribunal Supremo de Justicia”.
El presidente de FAUP, en representación de la sociedad civil, realiza un llamado a todos los poderes públicos sobre la necesidad de iniciar cuanto antes el proceso de designación de los nuevos rectores. “Estamos exigiendo al país, a los poderes públicos de Venezuela y nos declarados en campaña para escoger a los nuevos rectores para que las próximas elecciones sean válidas y tengan la carga de legitimidad suficiente, sobre todo frente a una eventual elección presidencial. A nadie le conviene salidas distintas a las electorales”.