La obra cuenta con las actuaciones de los primeros actores Luis Abreu y Tania Sarabia y Violeta Alemán, junto a Prakriti Maduro, Angélica Arteaga y Daniel Rodríguez, bajo la dirección de Héctor Manrique y la producción de Carolina Rincón
Profundo, pieza emblemática del dramaturgo venezolano José Ignacio Cabrujas, continúa presentándose con éxito en el Espacio Plural del Trasnocho Cultural de Paseo Las Mercedes, luego de agotar entradas durante el fin de semana de estreno.
La obra cuenta con las actuaciones de los primeros actores Luis Abreu y Tania Sarabia y Violeta Alemán, junto a Prakriti Maduro, Angélica Arteaga y Daniel Rodríguez, bajo la dirección de Héctor Manrique y la producción de Carolina Rincón.
Se trata de la cuarta pieza de Cabrujas que pone en escena el Grupo Actoral 80. Las primeras fueron: El americano ilustrado (dirigida por Héctor Manrique en el 2000), El día que me quieras ( Juan Carlos Gené en 2005) y Acto cultural (Manrique en 2011), las que lograron gran éxito de taquilla durante el tiempo que permanecieron en cartelera.
Profundo, estrenada el 27 de mayo de 1971, trata sobre una familia que vive en una vieja casa, en la que extraños fenómenos le hacen presagiar la presencia de un tesoro escondido. El tesoro enterrado y el profundo hueco que hacen para encontrarlo cambian sus vidas, obsesionándolos por la fantasía de la riqueza fácil.
La familia Álamo, vive bajo la dictadura de La Franciscana (Alemán), una sacerdotisa que se coloca al frente de una especie de secta que rodea el tesoro, y que representa a los caudillos del pasado y de la actualidad. Dicho tesoro, supuestamente enterrado por un sacerdote (Olegario), emula las morocotas de oro que enterraban los españoles en la época de la colonia y hace una similitud con el petróleo venezolano, en “la época de bonanza petrolera y el despilfarro” de la década de 1970, como escribió Álvaro Mata en el suplemento Papel Literario de El Nacional en 2010.
Historia aleccionadora
Cabrujas deja muy claro desde el principio que no hay tal tesoro escondido. Al final los personajes se dan cuenta que lo que hay es podredumbre y hedor. Es una especie de lección para aquellos que están acostumbrados a esperar de brazos cruzados que todo llegue fácil, sin esforzarse para conseguirlo. Una actitud de facilismo que algunos endilgan al gentilicio venezolano.
“Está en sintonía con la sombra más profunda de la venezolanidad: la relación mágica con la producción de riqueza, la viveza criolla y la cultura del milagro”, asegura al respecto Yoyiana Ahumada, escritora de la obra Venezuela: la obra inconclusa de José Ignacio Cabrujas.
Al final el mensaje es muy claro: ya es hora de dejar de vivir de la riqueza petrolera, de esperar ganar la lotería, de obtener una herencia o de quitarle al otro lo que tanto esfuerzo le ha costado. Es momento de entender que la riqueza no cae del cielo, ni se encuentra al cavar un hoyo. El país se construye con trabajo, esfuerzo y empeño.
Funciones y entradas
Sábados y domingos a las 4:00 pm. Las entradas tienen un precio de 140 bolívares y están a la venta en las taquillas del Trasnocho Cultural, ubicado en Paseo Las Mercedes.