Los universitarios que se mantienen encadenados en las adyacencias de la Embajada de Cuba, descartaron que imágenes del Presidente pudiesen ser interpretadas como una garante de su actual estado de salud. Denunciaron que tales respuestas están “alejadas” de los dictámenes de la constitución venezolana
“No le creeremos al ministro de comunicaciones, Ernesto Villegas, nosotros nos no chupamos el dedo. Un diario cubano, que es una maquinaria política de los Castro, no puede ser tomado como una Fe de Vida, la constitución tiene sus parámetros en ese proceder y no se han cumplido. Hasta que no sean cometidas nuestras exigencias no vamos a levantar la protesta”.
Así lo indicó Ulises Rojas, estudiante de la Universidad de Carabobo, en referencia a la cadena trasmitida la mañana de este jueves, en la que se revelaron unas fotografías del presidente Chávez junto a sus hijas, con una edición del diario Granma del pasado miércoles, la cual representa la primera imagen del mandatario nacional desde que se fue a La Habana, para ser intervenido quirúrgicamente por el cáncer que padece.
El universitario, quien además fue uno los privados de libertad por las por presuntamente “alterar la paz” en las adyacencias del la embajada de Cuba, explicó que hicieron llegar un comunicado al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) para dejar por escrito su rechazo a tal pronunciamiento, y la designación de una junta médica que certifique si está apto o no para seguir gobernando el país.
Radicalizarán protestas
Sin establecer un plazo, los estudiantes manifestaron que de no obtener respuestas radicalizaran sus protestas; mientras que reiteraron la intención de mantenerse encadenados en las inmediaciones de la delegación cubana, hasta que el Gobierno o la comunidad internacional cumpla con sus exigencias.
Durante la mañana de ayer, cuatro nuevos estudiantes se unieron a las protesta sumando un total de 24 encadenados, provenientes de diferentes casas de estudio superior de país. Además anunciaron que en los próximos días, los siete jóvenes aprendidos y otros compañeros serán recibidos como miembros permanentes de la manifestación.
“Tenemos una serie actividades programadas, las cuales pondremos en práctica sólo si no somos atendidos. Representamos a un pueblo con sed de verdad, ya basta de vernos las cara. A personeros del Gobierno le pedimos que nos escuchen seriamente, de lo contrario tomaremos acciones más radicales”, expresó Eduardo Bittor, uno de los encadenados.
Intento de represión
Rojas, explicó que durante la aprehensión que vivió el pasado jueves, donde fue llevado a diversas comandancias de la GNB para ser procesados, fueron finalmente recibidos y posteriormente puestos en libertad en el Destacamento número 52 de Altamira, municipio Chacao. No sin antes negarse a la presunta petición de una funcionaria, de firmar un documento que los obligaba a renunciar a su derecho a la protesta.
“La fiscal 42 del Ministerio Público, encargada de los derechos fundamentales, luego de constatar que habiamos sido violentados, procedió a dejarnos en libertad; pero antes de ello nos pidió que firmáramos un acta en la que renunciábamos ‘voluntariamente’ a manifestarnos frente a embajadas, lo cual evidentemente nos rehusamos pues la protesta es un derecho consagrado en la Constitución”, reseñó.
Finalmente, los manifestantes repudiaron que un aproximado de 150 efectivos de la Policía Nacional Bolivariana u unos 200 uniformados de la GNB, se encuentran resguardando la institución extranjera, mientras la violencia “sigue ganando terreno y robándose vidas en todo el país”.
“Mientras que aquí mantenemos una lucha de resistencia pacífica, somos custodiados por un cuerpo de seguridad que está equipado como si fuera a una guerra (…) Mientras tanto nuestras calles, carentes de vigilancia, se manchan a cada minuto de sangre provenientes de las víctimas de un hampa que se encuentra desbordada y descontrolada”, criticó Bittor.
Reporteros denuncian
Los fotógrafos Edsau Olivares de El Universal y Juan Camacho de la agencia de noticias News Report, acudieron a la Fiscalía General de la República, para formular la denuncia por los actos de violencia a los que fueron sometidos por parte de la Guardia Nacional Bolivariana este jueves, durante la cobertura de la protesta estudiantil en la embajada de Cuba, donde además fueron despojados de sus equipos de trabajo.
El periodista de Televen, Oliver Fernández, también fue agredido, mientras que al equipo reporteril de Globovisión se le ordenó retirarse de los alrededores de la Embajada.
Por su parte, Johan Merchán, secretario de asuntos profesionales del Colegio Nacional de Periodistas, condenó la acción violenta contra los trabajadores de los medios de comunicación e instó a todo los agraviados a denunciar ante los órganos pertinentes para dejar constancia de lo ocurrido. “No podemos quedarnos callados y de brazos cruzados ante estas agresiones a nuestros medios”, destacó.
Anabel Barrios Díaz / «mailto:abarrios@diariolavoz.net» abarrios@diariolavoz.net