Una bala perdida que ingreso a la vivienda donde vivía con su familia, en el sector El Encanto de La Vega, acabó con la vida de Frenyer Antonio Blanco Céspedes, de 13 años de edad. El proyectil procedente de la parte alta del cerro lo impacto en el pecho.
En el patio de la casa había una reunión familiar, el viernes a las 9:00 de la noche. Se encontraban sus padres, Franklin Blanco y Zulay Céspedes, tíos, padrinos y otros parientes cuando de pronto el muchacho cayó al piso y llamó a su padre para que lo ayudara.
Nadie escuchó detonación alguna, pero el menor había recibido un disparo en el pecho, lo trasladaron al Hospital Miguel Pérez Carreño y fue ingresado sin vida.
Esa misma noche acudieron al barrio los funcionarios del Cicpc, para iniciar las averiguaciones y en la inspección realizada en el sitio desde el cual habrían efectuado los tiros, colectaron varias conchas de proyectiles que están siendo analizadas.
Frenyer era el mayor de los dos hijos de Franklin Blanco y Zulay Cespedes. Les queda uno de 10 años.
Estudiaba sexto grado en la Escuela Básica José Vinicio Adames Piñero, ubicada en la entrada de Los Mangos, La Vega. “No se escucharon disparos. Nos dimos cuenta cuando mi hijo cayó al piso”, dijo Zulay Cespedes.
