Al mesonero Enderson Valenzuela (23) lo mataron de varios tiros por la espalda, el sábado en la tarde, en un sector de El Guarataro. Sospechan de un amigo, conocido como «Robert», quien lo estuvo llamando desde las 5 de la madrugada, hasta que Valenzuela decidió acudir a la cita
Quince cadáveres fueron ingresados a la morgue de Bello Monte entre sábado a domingo, y en lo que va de febrero van 317.
En la esquina de Piñango, avenida Baralt, mataron a Carlos David Camacho Espinoza (29), para quitarle su blackberry, el sábado a las 7 de la noche.
Camacho vendía caramelos en camionetas y en cercanías del Metro.
Su padre Carlos Camacho dijo que vivía en La Pastora y dejó dos hijos. Había prestado el servicio militar y luego se dedicó al comercio informal.
Al mesonero Enderson Valenzuela (23) lo mataron de varios tiros por la espalda, el sábado en la tarde, en un sector de El Guarataro.
Sospechan de un amigo, conocido como «Robert», quien lo estuvo llamando desde las 5 de la madrugada, hasta que Valenzuela decidió acudir a la cita.
Vivía en Altavista, Catia, era padre de una niña de 4 años y laboraba en un restaurante en El Paraíso.
Los familiares presumen que se trató de una venganza, urdida por «Robert», a raíz de una riña que tuvo Valenzuela con un pariente de el, en Yaracuy, en carnavales.
El mesonero tenía dos días de haber llegado de Yaracuy, de donde era oriundo. Tenía seis años viviendo en Caracas.
En el sector Guaicaipuro, avenida Andrés Bello, mataron a José Alberto González (21).
Vivía en el barrio El Carmen, de Sarría, en la parte alta de esa misma zona y salió a las 9 de la noche.
A su madre María Trinidad González le avisaron ayer a las 5:30 de la madrugada.
Sus amigos lo llevaron al hospital de Lídice. No sé qué le pasó, le dieron un tiro en el estómago. ¡Ay mi amor, qué dolor tan grande, me hubieran matado a mi, yo no puedo con esto, un muchacho de apenas 21 años, Dios mío, esto no puede ser! Exclamaba la mujer adolorida en la morgue.
AA