Elba Gordillo compareció ayer al juzgado del Reclusorio Oriente en Cuidad de México.
MÉXICO D.F. La dirigente del sindicato está acusada de usar el dinero del sindicato para cirugías estéticas, inversiones inmobiliarias, depósitos en Suiza y Lichtenstein, pago a una cadena de tiendas de lujo en Estados Unidos, galerías de arte y mantenimiento de un avión. entre otros, con apoyo de tres personas. Los cargos imputados a la líder sindical del magisterio mexicano Elba Esther Gordillo, detenida el pasado martes en México por desvío de fondos del sindicato, son violación a la ley federal contra la delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita.
Gordillo, de 68 años, compareció ayer detrás de una reja en el juzgado sexto de procesos penales federales, situado en el Reclusorio Oriente de Ciudad de México, donde se le leyeron las imputaciones.La hasta ahora poderosa dirigente sindical escuchó los cargos tranquila e intercambió algunas palabras con el secretario del juzgado, que le informó que su situación jurídica se definirá en un plazo de 72 horas que vence el viernes, prorrogable hasta 144 horas.
Gordillo, una figura que acumuló poder y se convirtió en intocable desde su llegada a la cúpula del sindicato en 1989, pasó el pasado martes su primera noche en la cárcel en México, después de ser detenida por malversación millonaria de recursos por el gobierno de Enrique Peña Nieto. Según la fiscalía, «la Maestra» trianguló para beneficio propio dinero de al menos dos cuentas del sindicato, pero el desfalco podría ser mayor ya que faltan por analizar 79 cuentas.
«Se trata de una averiguación a la que todavía le falta mucho», dijo el procurador general, Jesús Murillo Karam. Gordillo fue arrestada un día después de la promulgación de una reforma educativa que pretende devolver al estado la «rectoría» sobre la educación y que fue rechazada por la dirigente del magisterio. En México temas como las plazas para maestros, los ascensos magisteriales, los contenidos educativos y el destino de recursos han estado sujetos durante décadas a los intereses del SNTE, que es uno de los mayores sindicatos de América Latina con 1,4 millones de afiliados.
El anuncio de la fiscalía, que depende del gobierno de Peña Nieto, fue saludado por los dirigentes de los dos principales partidos de oposición, el conservador Partido Acción Nacional (PAN) y el izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD). «Era un escándalo desde hace rato y nadie se atrevía a tocarla, parecía que era parte de la corte celestial de la corrupción en México», dijo el presidente del PRD, Jesús Zambrano, al señalar que la «maestra» llegó a ser una de las personas más ricas del país.
El presidente del PAN, Gustavo Madero, también respaldó la decisión. «No podemos más que reconocer y apoyar una decisión que se toma en este sentido de buscar siempre castigar cualquier abuso, irregularidad, mal uso de los recursos de los maestros, de los sindicatos», expresó. En cambio, el ex candidato presidencial de izquierda Andrés Manuel López Obrador comparó la detención de Gordillo con el arresto en 1989 del líder petrolero Joaquín Hernández Galicia, «La Quina», por parte del gobierno de Carlos Salinas, en un caso que se consideró motivado políticamente.
La dirigente del sindicato está acusada de usar el dinero del sindicato para cirugías estéticas, inversiones inmobiliarias, depósitos en Suiza y Lichtenstein, pago a una cadena de tiendas de lujo en Estados Unidos, galerías de arte y mantenimiento de un avión. entre otros, con apoyo de tres personas. Gordillo llegó a la cúpula del magisterio impuesta por el entonces presidente Salinas, miembro del centrista Partido Revolucionario Institucional (PRI), al que también pertenece Peña Nieto.
Agencias