El presidente Mujica señaló que el país emprenderá un plan piloto en los hospitales para tratar las adicciones a las drogas
MONTEVIDEO. El presidente uruguayo, José Mujica, dijo ayer que el gobierno estudia realizar una experiencia piloto en los hospitales para tratar las adicciones a las drogas y que incluya un suministro «acotado y preciso» de marihuana a los adictos. En declaraciones a la secretaría de Comunicación de la Presidencia, Mujica reiteró su preocupación por el narcotráfico, porque «ese tipo de delito tiende a derramar una cultura delictiva sin freno donde la vida humana no cuenta».
La Presidencia indicó que los comentarios del primer mandatario «surgen a raíz del debate que sigue concitando la atención de los medios sobre la eventual legalización de la marihuana». Mujica presentó el año pasado un polémico proyecto de ley para que el Estado asuma el control de la producción y venta de marihuana, que el Parlamento planea debatir este año.
El mandatario recordó ayer que «la multiplicación de los ajustes de cuentas y otras derivaciones cruentas, la propia composición carcelaria generada por estos delitos o conexos al flagelo del narcotráfico, dan cuenta —como en otras sociedades— que el camino de la represión como única respuesta está fracasando rotundamente». Una fuente de la Presidencia indicó a medios que ese plan implicaría brindar solo cannabis, en algunos casos, y no otras drogas.
Según el proyecto de ley a estudio en el Parlamento, los consumidores registrados podrán poseer hasta 40 gramos de marihuana mensuales, quienes cultivan cannabis para consumo personal podrán tener hasta seis plantas y los clubes de consumidores un máximo de 90. Mientras el Parlamento retoma la discusión sobre la legalización -que divide al país y genera rispideces también entre los legisladores del gobernante Frente Amplio- el Gobierno anunció que entre abril y junio habrá un «periodo de reflexión» con charlas y seminarios sobre el tema en todo el país.