Franklin Vicent Hernández Viña (14), recibió la descarga eléctrica cuando la vara que utilizó para bajar el fruto, hizo contacto con el cable de alta tensión
La desesperación se apoderó de familiares y vecinos de un estudiante de bachillerato, al no poder evitar que el jovencito muriera electrocutado tras recibir una fuerte descarga eléctrica, cuando bajaba mangos de una mata ubicada en el patio de su vivienda, situada en el sector Quebrada de Cúa.
El infortunado joven, de nombre Franklin Vicent Hernández Viña de 14 años de edad, quedó enredado entre las ramas del árbol y fue rescatado por su padre, una vez que se logró separarlo del conductor de energía.
Parientes del fallecido comentaron que este jovencito, quien cursaba estudios de tercer año de bachillerato en la Técnica de Quebrada de Cúa, llegó a su casa cerca de las 5:30 de la tarde del martes y como habitualmente lo hacía, salió al patio de la casa a tumbar mango verde para comer con sal.
Todo parece indicar que en esta oportunidad, el muchacho subió más de lo acostumbrado la mata de mango y cuando lanzó la vara de aluminio, que le servía para tumbar el fruto, hizo contacto con el cable de alta tensión que estaba oculto en el follaje y se electrocutó.
Sus familiares se percataron del hecho y apelaron a todos los recursos para tratar de salvar al jovencito, pero los esfuerzos resultaron inútiles.
Una vez que lograron separar la vara de metal de las manos del adolescente, éste ya agonizaba. El muchacho fue llevado al hospital Dr. Osío de Cúa, a donde ingresó sin signos vitales.
Estaba prohibido
Pese a que los padres de Franklin Vicent Hernández Viña, habían prohibido a sus cuatro hijos “monear” la mata, pues daba corriente, el jovencito, el menor de los hermanos, tenía adicción al mango verde y todos los días bajaba el fruto.
“No era su día, y nosotros hicimos todo para ayudarlo, pero la mata y todo lo que estaba alrededor daba corriente”, indicó una de las dolientes.
Señaló que en reiteradas oportunidades han enviado comunicación a los directivos de Corpoelec para que poden los árboles, porque las ramas están sobre los cables de alta tensión y no les han prestado ayuda. “Hasta las cercas dan corriente y ni siquiera por el riesgo que existe se acercan a la zona”, dijo uno de los deudos del adolescente electrocutado.
Manifestó su pesar por la muerte de Franklin Vicent Hernández Viña, de quien dijo era un joven tranquilo, “deseoso de progresar”, que trabajaba todos los días con su mamá en el taller de latonería y pintura lavando carro, al regresar de estudiar.
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