La levantadora de pesas Soraya Jiménez, primera mujer en cosechar un oro olímpico para México -logrado en Sidney-2000-, falleció este jueves en su domicilio de la capital mexicana por un infarto a la edad de 35 años.
«La campeona olímpica Soraya Jiménez Mendivil dejó de existir a consecuencia de un infarto al corazón este jueves», reportó el Comité Olímpico Mexicano en su sitio electrónico.
El comité recordó que «Soraya fue la primera deportista mexicana en ganar una medalla de oro en el debut de la halterofilia femenil durante los Juegos Olímpicos de Sidney 2000».
Tras conocerse el fallecimiento de Jiménez, que había padecido ya varios problemas graves respiratorios y dio positivo por dopaje en 2002, empezaron a llegar los mensajes de condolencias de las máximas autoridades mexicanas y figuras del mundo deportivo.
«Lamento el fallecimiento de la atleta mexicana y medallista olímpica, Soraya Jiménez. Mis condolencias para su familia», dijo el presidente Enrique Peña Nieto en su cuenta de la red social Twitter.
«Descansa en paz Soraya Jiménez, por siempre la primera campeona olímpica… abrazo y resignación a su familia», escribió la clavadista Paola Espinosa, doble medallista de plata en los Juegos de Pekín-2008 y Londres-2012.
La familia de la atleta emitió posteriormente un comunicado en el que solicita «privacidad en estos momentos difíciles» y agradece «a todas las personas que hacen y han hecho alguna oración para su descanso eterno», informó el diario deportivo Récord.
Entre los problemas de salud que padeció Jiménez, que medía 1,54 m, estaban más de una docena de operaciones en la pierna izquierda, la pérdida de un pulmón y varios paros cardiorrespiratorios, de acuerdo con medios mexicanos.
En 2002, la atleta dio positivo en una prueba antidopaje durante un torneo Panamericano.
Jiménez fue inhabilitada durante seis meses de toda competencia deportiva, pero poco después fue exonerada por la Federación Internacional de Levantamiento de Pesas, recordó el diario El Universal.
Después del éxito de Jiménez en Sidney, donde se impuso de forma sorprendente en la categoría de 58 kg, la única mexicana que pudo igualar su marca fue la taekwondoca Rosario Espinoza al lograr un oro en la división de +67 kg en Pekín-2008.
Antes de Jiménez, las deportistas olímpicas mexicanas habían sumado una plata en esgrima (Pilar Roldán) y un bronce en natación (María Teresa Ramírez), ambas en los Juegos Olímpicos que albergó México en 1968.
Además de su oro olímpico en halterofilia, un deporte hasta entonces reservado a los hombres en México, Jiménez conquistó también en su trayectoria seis campeonatos nacionales, una medalla de bronce en los Juegos Panamericanos de Winnipeg-1999 y un octavo lugar en el Campeonato Mundial de 1999, antes de anunciar su retirada previa a los Juegos de Atenas-2004.
La muerte de Jiménez vuelve a enlutar este año al deporte olímpico mexicano después del fallecimiento el 16 de enero del marchista Noé Hernández, medallista de plata también en Sidney-2000, a causa de una herida de bala recibida en un tiroteo desatado en un bar en diciembre.
AFP
La levantadora de pesas Soraya Jiménez, primera mujer en cosechar un oro olímpico para México -logrado en Sidney-2000-, falleció este jueves en su domicilio de la capital mexicana por un infarto a la edad de 35 años.
«La campeona olímpica Soraya Jiménez Mendivil dejó de existir a consecuencia de un infarto al corazón este jueves», reportó el Comité Olímpico Mexicano en su sitio electrónico.
El comité recordó que «Soraya fue la primera deportista mexicana en ganar una medalla de oro en el debut de la halterofilia femenil durante los Juegos Olímpicos de Sidney 2000».
Tras conocerse el fallecimiento de Jiménez, que había padecido ya varios problemas graves respiratorios y dio positivo por dopaje en 2002, empezaron a llegar los mensajes de condolencias de las máximas autoridades mexicanas y figuras del mundo deportivo.
«Lamento el fallecimiento de la atleta mexicana y medallista olímpica, Soraya Jiménez. Mis condolencias para su familia», dijo el presidente Enrique Peña Nieto en su cuenta de la red social Twitter.
«Descansa en paz Soraya Jiménez, por siempre la primera campeona olímpica… abrazo y resignación a su familia», escribió la clavadista Paola Espinosa, doble medallista de plata en los Juegos de Pekín-2008 y Londres-2012.
La familia de la atleta emitió posteriormente un comunicado en el que solicita «privacidad en estos momentos difíciles» y agradece «a todas las personas que hacen y han hecho alguna oración para su descanso eterno», informó el diario deportivo Récord.
Entre los problemas de salud que padeció Jiménez, que medía 1,54 m, estaban más de una docena de operaciones en la pierna izquierda, la pérdida de un pulmón y varios paros cardiorrespiratorios, de acuerdo con medios mexicanos.
En 2002, la atleta dio positivo en una prueba antidopaje durante un torneo Panamericano.
Jiménez fue inhabilitada durante seis meses de toda competencia deportiva, pero poco después fue exonerada por la Federación Internacional de Levantamiento de Pesas, recordó el diario El Universal.
Después del éxito de Jiménez en Sidney, donde se impuso de forma sorprendente en la categoría de 58 kg, la única mexicana que pudo igualar su marca fue la taekwondoca Rosario Espinoza al lograr un oro en la división de +67 kg en Pekín-2008.
Antes de Jiménez, las deportistas olímpicas mexicanas habían sumado una plata en esgrima (Pilar Roldán) y un bronce en natación (María Teresa Ramírez), ambas en los Juegos Olímpicos que albergó México en 1968.
Además de su oro olímpico en halterofilia, un deporte hasta entonces reservado a los hombres en México, Jiménez conquistó también en su trayectoria seis campeonatos nacionales, una medalla de bronce en los Juegos Panamericanos de Winnipeg-1999 y un octavo lugar en el Campeonato Mundial de 1999, antes de anunciar su retirada previa a los Juegos de Atenas-2004.
La muerte de Jiménez vuelve a enlutar este año al deporte olímpico mexicano después del fallecimiento el 16 de enero del marchista Noé Hernández, medallista de plata también en Sidney-2000, a causa de una herida de bala recibida en un tiroteo desatado en un bar en diciembre.
AFP