(LaVoz//AA).- Una funeraria ubicada en la avenida Francisco de Miranda, junto al hospital Ana Pérez de León, retuvo durante tres días el cadáver de un septuagenario fallecidos por causas naturales en ese vecino centro asistencial, para presionar a los deudos a cancelar los servicios funerarios que ofrecían.
Juan Bautista Durán, de 77 años, murió a las 4:00 de la tarde del domingo a consecuencia de un ACV por problemas de salud que lo afectaban y que lo mantuvieron durante tres meses recluidos en la sede del hospital Pérez de León II.
El anciano vivía en Turgua y fue a través de una vecina de nombre Rosa que sus familiares supieron que había muerto. Mayor fue su sorpresa cuando al llegar se enteraron que el cadáver reposaba en la funeraria Prevención Familiar Leal C.A que queda al inicio de la calle Las Tunitas, antes del Gran Muro de Petare.
Jesús Cardozo, sobrino del fallecido, dijo que supo de la muerte de su tío a las 4:00 de la tarde, la misma hora en que le notificaron del deceso a Basilio Durán, hermano del difunto.
Ambos acudieron a la funeraria donde se entrevistaron con la encargada, quien les dijo que debían cancelar la suma de Bs. F. 5.500 para que les entregaran el cadáver preparado, a lo que la familia se negaba alegando que ninguno había hecho negocio con ellos.
El sobrino de Durán dijo que fue llevado bajo engaño hasta el Registro Civil del Municipio Sucre, donde le entregaron el permiso de inhumación para enterrar a su tío en el Cementerio General del Sur. Los encargados de la funeraria se quedaron con el documento y le indicaron que ahora la suma que debían pagar era de Bs. 8.500.
Más tarde les indicaron que el monto a pagar era Bs F. 10 mil y que mientras más se tardaran en conseguir el dinero “más teníamos que pagar”, dijo el hermano del fallecido.
Desesperados los deudos de Juan Bautista Durán reunieron entre toda la familia la suma de Bs F 2 mil que le entregaron a la encargada Janeth Flores, pero la mujer dijo que eso no cubría los gastos. Fue cuando acudieron a la Fiscalía y tras denunciar el hecho, se ordenó que una comisión del Cicpc retirara el cadáver que fue llevado a la morgue de Bello Monte en calidad de depósito.
El ministro Néstor Reverol giró instrucciones este mismo miércoles para que una comisión del Cicpc acudiera a la funeraria e iniciara una averiguación penal. Aunque les entregaron el cuerpo a la comisión de ciencias forenses, la encargada de la funeraria se negó a entregarle a los deudos el permiso de inhumación y el acta de defunción que además, les entregaron ilegalmente en el hospital.
Ayer las puertas de la funeraria que aparece con otro nombre en un aviso con la imagen del Divino Niño, estaban abiertas. El mismo cartel tiene un aviso donde dice que prestan servicio las 24 horas.
José Pineda, quien según se presentó como encargado de la funeraria, dijo que un hombre que se identificó como Johander González y quien dijo ser familiar del difunto solicitó los servicios funerarios el domingo y por esa razón el cuerpo fue trasladado del hospital.
Dijo que González llevó un permiso de la Junta Comunal porque no había localizado a los deudos del difunto. Fue por esta razón que según explicó se preparó el cuerpo y se montó la capilla.
El lunes este supuesto señor volvió pero la familia del muerto no llegaba. González acudió sin el dinero que debía y que según ellos daba un monto Bs F. 14.000 bolívares. Solo el servicio de capilla eran 5.500 bolívares.
Luego la funeraria se llevó el cadáver para la capilla que tienen en la otra funeraria de la avenida San Martín pero los funerarios no veían el dinero por parte de la familia. Dijo que cuando llegó el Cicpc el cuerpo estaba en un ataúd preparado.