Si el venezolano Marwin González no le hubiera conectado un sencillo en la novena entrada con dos outs, el lanzador japonés hubiera conseguido el juego perfecto más perfecto de la historia. De 109 pitcheos que hizo, los Astros pusieron en juego a sólo 12 de ellos
Se suele pensar que los partidos sin hits y los juegos perfectos son, en su mayoría, sucesos aleatorios y casuales. Pero eso no describiría lo que ocurrió en este partido. De hecho, nunca ha habido un lanzador más dominante que Darvish en su actuación del martes cuando le rompieron su juego perfecto con dos outs en la novena entrada. Nunca.
Hasta que Marwin González conectó ese sencillo al central, Darvish había hecho 109 pitcheos y los Astros solo habían puesto en juego 12 de ellos en toda la noche, lo que significa que acumularon más ponches (14) que pelotas en terreno bueno (12). Increíble.
De acuerdo con el valioso libro de estadísticas y récords de Joe Taxiera, «A Unique Look at Big League Baseball,» Darvish fue el 11º lanzador en la historia al que le rompieron un juego perfecto con dos outs en la novena entrada. Ni uno de los anteriores 10 habían ponchado al menos 14 de los primeros 26 bateadores. Y solo dos de esos pitchers llegaron al doble dígito en abanicados:
-Mike Mussina de los Yankees (13), el 2 de septiembre del 2001, ante los Medias Rojas.
-Dave Stieb de los Azulejos (11), el 4 de agosto de 1989, ante los Yankees.
Así que este fue, de forma oficial, el roce con la perfección más poderoso que jamás se haya presenciado en las grandes ligas.
Tampoco es que batean
Mientras se observaba a Yu Darvish maniatar de forma magistral a los Astros el martes pasado en la noche, muchos llegaron a pensar en esto en algún momento:
¿acaso este equipo podría ser dejado sin hits unas seis veces este año?
Baseball Prospectus proyecta que la alineación de los Astros bateará para .236/.303/.385 este año. Y eso es bien difícil de conseguir en esta época. En los últimos 20 años, solo un equipo de la Liga Nacional ha igualado o ha jugado por debajo de esos números. Y ese equipo fueron los Astros del año pasado (.236/.302/.371), quienes fueron dejados sin hits en solo un partido en toda la temporada (por Matt Cain). Así que a hacer sus apuestas.
Los Astros juegan ahora en una división que incluye a Félix Hernández, Jered Weaver, Jarrod Parker, Brett Anderson y un sinnúmero de brazos vivos. Y ahora están en la misma liga que Justin Verlander, Max Scherzer, David Price, Chris Sale, Jon Lester y CC Sabathia. Entre otros.
Así que para referencia futura, todo indica que, aunque eviten enfrentarse al Rey Félix la semana que viene, se tendrán que enfrentar a Weaver el siguiente fin de semana. Y más o menos una semana luego de eso, comenzarán una racha en la que se medirán a los Marineros, Medias Rojas, Yankees, Tigres, Vigilantes y luego de nuevo los Tigres, en ese orden. Así que no hay que perder de vista esas alertas de partidos sin hits.
Una rareza
Los Astros pasaron 50 años en la Liga Nacional y nunca fueron dejados sin hits en un partido llevado a cabo en Houston. Y entonces en su segundo partido en la Liga Americana por poco son dejados sin imparables.
Además, hasta la pasada temporada (cuando Cain lo hizo), solo había habido un partido perfecto en la historia en la que un lanzador consiguiera 14 ponches o más. Sandy Koufax fue quien lanzó ese partido, el 9 de septiembre de 1965. Quiere decir que se vieron dos de esos partidos en un periodo de nueve y medio meses ante el mismo equipo. Algo loco.
Y otra cosa más. En caso de que los Astros fuesen víctimas de un partido perfecto, al menos habrían tenido la solución perfecta para responder al día siguiente, al colocar en la loma un lanzador que ha logrado un partido perfecto (el abridor del juego del miércoles fue Philip Humber, quien lograra uno el año pasado).
Así que, ¿cuán dominante fue Darvish en este partido? Logró que los Astros abanicaran y fallaran unas 27 veces. Como reportó el departamento de Estadísticas e Información de ESPN, solo un lanzador en los últimos cinco años había logrado más fallos en cualquier apertura: Francisco Liriano (30), contra Oakland el año pasado.
En aras de la comparación, esos son tres abanicadas y falladas contra Darvish en una noche más que las logradas por Aaron Cook en sus últimas ocho salidas de forma combinada. Los datos de Cook en esas ocho aperturas, de acuerdo a PitchFX: 540 pitcheos, 24 fallos.
Una nota refrescante de parte del Elias Sports Bureau: si Darvish hubiese conseguido ese out 27, se habría convertido en el primer lanzador en conseguir un juego perfecto en su primera salida de cualquier temporada.
Yu y Cy
Una pregunta divertida de parte del usuario de Twitter Jorge J. Muniz Ortiz: ¿Acaso Darvish tiene el nombre más corto de algún lanzador que haya conseguido un juego perfecto? Y la respuesta es: no, con un asterisco. Un tipo llamado Cy Young lanzó el primer juego perfecto en la era moderna, el 5 de mayo de 1904.
Como es conocido, aficionados a Cy Young, el primer nombre real de Young era Denton. Así que si se descartan los apodos, Darvish habría roto el récord compartido con Roy Halladay, Len Barker, Jim Bunning, Don Larsen y Lee Richmond. Casi, casi.
Una cosa más que habría hecho este juego perfecto particularmente increíble: para lanzar un partido perfecto, no se pueden dar boletos gratis, ¿correcto? Bueno, esta fue la salida número 31 en la carrera de Grandes Ligas de Darvish. ¿Saben cuántas veces no dio boletos en sus anteriores 30 salidas? ¡Por supuesto, la respuesta es ninguna!
Semana de pitcheo
Diez blanqueadas en las primeras series de la campaña dan muestra de la prevalencia del pitcheo sobre la ofensiva en este arranque de la temporada beisbolera del 2013.
La voz cantante en este dominio de los lanzadores la llevan los Nacionales de Washington, que dejaron en blanco a los débiles Marlins de Miami en los dos primeros cotejos, con triunfos para Stephen Strasburg y el cubano Gio González.
En total, los serpentineros capitalinos le toleraron una sola carrera en 27 innings a los de Miami, únicos que todavía no han marcado en la casilla de las victorias entre los 30 equipos de las Mayores.
Pero no son los Nacionales los únicos con dos blanqueadas, pues los Vigilantes de Texas también dispusieron dos veces por la vía de los ceros frente a los igualmente anémicos Astros de Houston.
El japonés Yu Darvish estuvo a un solo out de apuntarse el primer juego perfecto de la campaña, malogrado por un sencillo del venezolano Marwin González.
Un día después, el dominicano Alexis Ogando se combinó con otros cuatro pitchers para dejar en cero a los Astros, que había ganado el choque inaugural de la campaña.
Los Medias Blancas de Chicago, los Dodgers de Los Angeles, los Gigantes de San Francisco, los Piratas de Pittsburgh, los Marineros de Seattle y los Filis de Filadelfia son los otros equipos que ya acumulan un triunfo por blanqueada.
Pero sólo el zurdo Clayton Kershaw, de los Dodgers, ha caminado toda la ruta en su victoria del Día Inaugural sobre los campeones Gigantes.
Asimismo, Kershaw y Gio han aportado sendos cuadrangulares para apuntalar sus respectivas victorias.
De los 30 equipos, hay 19 que lanzan para menos de cuatro limpias por juego, mientras que los pitchers de Texas encabezan las Grandes Ligas en ponches propinados, con 43, en tanto los Tigres de Detroit suman 16 bases por bolas, líderes en este departamento negativo.
En cuanto a ofensiva, los equipos más bateadores hasta el momento son los Rockies de Colorado, los Medias Rojas de Boston y los Orioles de Baltimore, únicos con average superior a los .300.
Aunque aún no han jugado en su paraíso ofensivo de Denver, los Rockies batean para .353, mientras Boston lo hace para .315 y Baltimore para .300 exactos.
Los Rockies de Colorado son también los que suman más jonrones (8), uno más que los Azulejos de Toronto.
Los bateadores de los Medias Rojas, Tigres, Reales de Kansas City y Piratas son los únicos que todavía no han mandado ninguna pelota sobre las cercas.
Los Orioles de Baltimore y los Mets de Nueva York son los que más carreras han fabricado, 20 cada uno, mientras que los Marlins suman apenas una en tres juegos, gracias a un solitario cuadrangular de Justin Ruggiano.
Y la gran figura ofensiva en esta primera semana de acción ha sido Chris Davis, primera base de los Orioles, quien batea para un enorme promedio de .636, producto de siete hits en 11 turnos.
Seis de sus siete imparables han sido extrabases, tres dobles e igual cantidad de jonrones, mientras ya acumula 11 carreras impulsadas.
Jayson Stark ////// espndeportes.com