El candidato del chavismo a la Presidencia de Venezuela, Nicolás Maduro, prometió hoy que mejorará el funcionamiento de las industrias en manos estatales y combatirá la corrupción en el país, e insistió en que reconocerá el resultado de los comicios «si la burguesía gana las elecciones».
Rodeado de funcionarios como el ministro de Petróleo y Minería y presidente de la petrolera estatal, Rafael Ramírez, y el titular de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, el aspirante oficialista pidió ayuda a sus seguidores para acabar con la corrupción y señaló que no habrá «intocables».
«Voy a lanzar una misión nueva, que será centro de mi Gobierno. Voy a lanzar la ‘Gran Misión Eficiencia o Nada’ para perseguir la corrupción, el burocratismo. Llamo a que esta gran misión sea la misión del pueblo, necesito que ustedes sean mis inspectores», dijo.
«Como vicepresidente de (Hugo) Chávez empecé a organizar un cuerpo secreto, especial, para luchar contra la corrupción. Vamos a buscar pruebas, a perseguir la corrupción donde esté, con mi vida misma si es necesario, acá no va a haber intocables», agregó ante centenares de seguidores en el estado de Monagas (oriente).
La misión, detalló, incluirá también inspecciones a las empresas siderúrgicas estatales Sidor y Venalum, que, según denuncias opositoras, registran abultadas pérdidas y acumulan grandes deudas.
En momentos en que la campaña para las elecciones de este domingo entra en su recta final, Maduro dio algunas pistas sobre cómo sería un Gobierno suyo.
«¿Ustedes saben cómo voy a gobernar yo? Mi respuesta es muy clara y contundente: el Plan de la Patria, continuar con el petróleo en manos de la patria, con las grandes misiones», afirmó en relación a los programas sociales lanzados por el fallecido presidente Hugo Chávez.
En respuesta a las críticas opositoras por una supuesta falta de transparencia del sistema electoral, Maduro propuso que todos los candidatos firmen un documento en el que se comprometen a respetar el resultado del domingo.
«Si la burguesía gana las elecciones, yo lo reconozco», reiteró en medio de duras críticas al candidato opositor, Henrique Capriles, a quien volvió a tildar de «caprichito» y «burguesito».
«Ayer (Capriles) tuvo una sobredosis de odio, de obsesión conmigo y con el pueblo. Estaba vomitando puro odio. Lo peor no es que me ataque a mí, lo peor es que llena de odio a buena parte de sus seguidores», sostuvo en referencia a una masiva marcha realizada el domingo por la oposición.
Maduro lidera las encuestas por hasta 20 puntos cuando faltan apenas seis días para unas elecciones en las que el ganador gobernará hasta el 2019, concluyendo así el mandato que Chávez obtuvo en octubre y comenzó el pasado 10 de enero.
EFE