La primera víctima fue Kelleyber Jonaiker Padilla Puerta, de 19 años de edad. Este muchacho fue asesinado en la calle La Cruz, sector cinco de Nueva Cúa, a las 9:30 de la noche del lunes
Dos crímenes, en menos de diez horas, ocurrieron en diferentes sectores del municipio Rafael Urdaneta, entre la noche del pasado lunes y la mañana de ayer. Los infortunados son dos jóvenes que fueron atacados con armas de fuego por sujetos hasta ahora desconocidos.
La policía identificó al primero de los occisos como Kelleyber Jonaiker Padilla Puerta, de 19 años de edad, quien fue asesinado en la calle La Cruz del sector cinco de Nueva Cúa, a las 9:30 de la noche del lunes. El muchacho vivía en la casa signada con el número 26 de la referida zona donde ocurrió el crimen.
El cadáver de Padilla Puerta, que presentó múltiples impactos, quedó tendido en la vía pública, siendo levantado por los detectives del Eje contra Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas de los Valles del Tuy, quienes acudieron al sitio donde además colectaron varias conchas de bala 9 milímetros y dos de escopeta calibre 12.
Otro hecho
Los efectivos del Cicpc no habían culminado la redacción de las actas procesales, donde reseñaban el crimen de Padilla Puerta, cuando les notificaron que en la calle Bolívar, cruce con calle Los Olivos del sector Vista Alegre II de Mume en Cúa yacía el cuerpo sin vida de un adolescente.
Los funcionarios se alistaron y acudieron a la dirección mencionada donde levantaron el cuerpo ensangrentado de Oswaldo Manuel Rodríguez Salas, de 15 años de edad, quien murió luego que recibiera un tiro en la garganta. Al parecer le dispararon con un arma de fuego, tipo revólver. El hecho ocurrió a eso de las 6:00 de la mañana de ayer. La víctima residía en las adyacencias del lugar.
Ambos cadáveres ingresaron a la Medicatura Forense del Tuy.
Varias hipótesis
Los funcionarios del Eje contra Homicidios del Cicpc del Tuy iniciaron las investigaciones de los dos crímenes e indagan las causas.
Se especuló que los detectives se inclinan por la hipótesis del ajuste de cuentas en ambos casos, debido a cómo ocurrieron los hechos, pero aún no descartan otras conjeturas.
MIP-TUY / Jean Carlos Rodríguez
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