Los pillos, en grupos de seis, violentan las cerraduras de las viviendas desocupadas, causan destrozos y desorden buscando armas, joyas y carros
Aterradas se encuentran las familias de la urbanización Las Brisas de Cúa, ante los hurtos y robos que desde hace dos semanas vienen ocurriendo en esta comunidad, a plena luz del día.
Los antisociales, en grupo de seis, violentan las cerraduras de las viviendas desocupadas o escalan al interior por los muros y una vez adentro desordenan lo que encuentran a su paso, quizás buscando armas, joyas y las llaves de los vehículos.
La situación se agrava, porque algunas personas han sido víctimas directas de estos robos. A las mismas los pillos las obligan a entregarles sus pertenencias, algunas, por gracia de Dios, se han salvado de las acciones de los hampones.
Cuestionan los vecinos la poca ayuda brindada por los efectivos policiales, quienes nunca llegan a tiempo al urbanismo cuando se están cometiendo los hurtos.
Piden a los cuerpos de seguridad incrementar la vigilancia en esta zona.
MIP-TUY