BEIRUT — Un ataque aéreo del gobierno sirio el sábado sobre una ciudad del noroeste del país dejó 18 muertos, destrozó comercios, incendió vehículos y provocó que se elevara una gran columna de humo en el horizonte.
La fuerza aérea del presidente Bashar Assad ha sido uno de sus mayores activos en los dos años de guerra civil, valiéndose de cazas y helicópteros para frenar el avance de los insurgentes, pero con frecuencia ha atacado objetivos civiles. AP