WASHINGTON. Estados Unidos dijo el martes que no está en condiciones de aceptar el triunfo de Nicolás Maduro y calificó de «difícil de explicar» la decisión de proclamar ganador al candidato oficialista tras los comicios presidenciales del domingo sin haber realizado un reconteo total de los votos como solicitó el aspirante opositor Henrique Capriles.
Maduró respondió acusando a la embajada de Estados Unidos de financiar protestas y brotes de violencia registrados que dejaron el lunes 7 muertos y docenas de heridos en la nación sudamericana en rechazo a los resultados electorales del domingo, que favorecen al presidente encargado venezolano.
«La embajada (estadounidense) ha financiado y dirigido todos los hechos de violencia», dijo el mandatario en la televisión estatal, y aunque no presentó ninguna prueba concreta señaló que lo haría más adelante. «La embajada de Estados Unidos ha financiado a estos grupos neonazis».
Patrick Ventrell, portavoz del Departamento de Estado, dijo en conferencia de prensa que Estados Unidos «está preparado para trabajar con cualquier gobierno que resulte de este proceso electoral. Pero ante lo ocurrido ayer, estamos consultando con socios claves, la OEA (Organización de los Estados Americanos), la Unión Europea y otros vecinos regionales para analizar esto».
«La OEA, la Unión Europea han expresado opiniones diferentes, y también hay acusaciones de irregularidades electorales expresadas por la oposición, así que la decisión del CNE (Consejo Nacional Electoral) de declarar ganador a Maduro antes de completar el reconteo es difícil de entender, y ellos no explicaron su prisa para tomar esa decisión», dijo Ventrell.
Washington es una de las pocas capitales que aún no ha emitido un mensaje de felicitación a Maduro.
La procuradora general venezolana informó el martes que siete personas murieron y 62 resultaron heridas durante las protestas callejeras ocurridas tras las elecciones del domingo. Maduro anunció que no permitirá marchar el miércoles a la oposición en Caracas.
Ventrell comentó que «debe permitírsele a las personas protestar pacíficamente y expresar sus opiniones, pero no hay lugar para la violencia».
AP