MADRID. Ecuador «está con Venezuela» y no permitirá que «el golpismo» se imponga por la fuerza en ese país, aseguró este viernes el presidente de Ecuador, Rafael Correa, durante un acto en Madrid con la comunidad migrante.
«Todos estamos con Venezuela», lanzó Correa ante las miles de personas reunidas en el Palacio de Vista Alegre, una antigua plaza de toros en el popular barrio madrileño de Carabanchel.
«No permitiremos que el golpismo trate de lograr por la fuerza lo que no logra en las urnas», afirmó en referencia al candidato opositor a las elecciones presidenciales Henrique Capriles.
«El comandante Chávez sigue venciendo», aseguró Correa despertando una fuerte ovación.
Correa aprovechó también para agradecer su apoyo en los comicios ecuatorianos a la comunidad migrante en España, quien el 17 de febrero lo votó al 85%.
«Hemos vencido gracias a ustedes, contundentemente, pero para nosotros esa victoria no es el punto de llegada es el punto de partida», aseguró ante una audiencia que enarbolaba banderas de Ecuador.
Cerca de medio millón de ecuatorianos vive en España y el gobierno de Correa lleva a cabo un programa de ayudas para facilitarles el regreso a su país.
«Me he salido del trabajo y me he venido largo», decía entre el público Nelly Torres, de 51 años originaria de Loja. «Rafael Correa es un hombre que ha hecho mucho por nuestro país», afirma esta mujer que dejó su país hace 14 años.
También Michael Naranjos, de 37 años, cree que «el Ecuador ha dado un gran cambio con este presidente». Emigró desde Quito hace 13 años y como muchos perdió su trabajo con el estallido de la crisis.
Ahora la gustaría volver a Ecuador pero las deudas con el banco se lo impiden. «Tengo una hipoteca y eso es lo que me retiene aquí. Si lograse dar mi piso en pago ya me regresaría a mi país donde ahora mismo hay trabajo», dice.
Según la Coordinadora Nacional de Ecuatorianos en España, unos 15.000 ecuatorianos están afectados por el problema de las hipotecas que, desde el inicio de la crisis en 2008, causó el desalojo de decenas de miles de familias en un país donde el desempleo alcanza ya el 26,02%.
Correa, que no tenía previsto reunirse con representantes del gobierno español, debía finalizar su visita por un acto similar el sábado con la comunidad ecuatoriana de Valencia (este).
AFP