El presidente de la República, Nicolás Maduro, prometió el martes aportar «un nuevo dinamismo» a la consolidación del Mercosur, bloque que tiene que cambiar para ampliar su influencia, durante una visita oficial a Uruguay que realiza en el marco de una gira regional.
Maduro -que viajó en medio de una crisis postelectoral tras su triunfo el pasado 14 de abril, impugnado por la oposición- defendió en Montevideo la incorporación en 2012 de Venezuela al bloque sudamericano integrado además por Argentina, Brasil y Uruguay, más Paraguay suspendido. «Venezuela viene con modestia, con ganas de aprender», dijo el mandatario en conferencia de prensa junto a su par uruguayo José Mujica.
«Venimos a poner sobre la mesa del Mercosur también las experiencias exitosas que abren el horizonte económico, social y político (…). Son muchas cosas que crean un nuevo dinamismo en el proceso de consolidación de Mercosur», aseguró Maduro, que debe asumir la presidencia pro témpore del bloque a fines de junio.
Según el mandatario, la tendencia del Mercosur «es a la ampliación» porque el bloque «tiene que seguir cambiando para convertirse en un poderoso espacio, de unión económica de Suramérica y el continente».
Por su parte, Mujica -calificado por Maduro de su «gran consejero»- defendió la importancia de la incorporación de Venezuela al Mercosur. «Consideramos por las asimetrías particulares que tiene el Mercosur como una relación importantísima la presencia de Venezuela en el marco de lograr relaciones mucho mas estables y más simétricas de acuerdo a las naturales diferencias que existen en esta comunidad de pueblos», sostuvo.
Tanto Mujica como Maduro tuvieron palabras en recuerdo al fallecido expresidente venezolano Hugo Chávez.
El presidente uruguayo llamó a que «quede como en el viento un recuerdo y un abrazo tendido en el tiempo» a Chávez mientras que Maduro aseguró que con sus acciones busca ratificar el camino iniciado por su antecesor. «La huella esta fresca, la huella del comandante Chávez. Y nosotros vamos tras esa huella», aseguró.
Visita cuestionada
Durante las menos de 24 horas que tiene previsto permanecer en el país, Maduro visitó una empresa gestionada por trabajadores que venderá transformadores para el Metro de Caracas, recibió las llaves de la ciudad y planeaba brindar un discurso en la central sindical Pit-CNT.
En medio de un fuerte retraso en la agenda oficial, un encuentro con el expresidente Tabaré Vázquez (2005-2010) fue suspendido.
Se trata de la primera gira internacional del presidente venezolano desde que asumió el 19 de abril tras su impugnado triunfo y el debate postelectoral se trasladó a Montevideo, donde el opositor venezolano Leopoldo López dio una conferencia y anunció que presentaría junto a otros dos políticos de su país una denuncia contra el gobierno de Maduro por persecución política.
«Estamos presentando a las distintas facciones parlamentarias y el Mercosur lo que es la situación del país y en particular denuncias concretas de violación de derechos humanos, de persecución, tortura, presos políticos y una situación muy grave de personas que han sido botadas de su trabajo por razones políticas», señaló a la AFP López, del opositor Partido Voluntad Popular.
Por la tarde, un caceroleo convocado en rechazo a la visita de Maduro reunió apenas una veintena de personas. Al ser consultado por las críticas de la oposición, Maduro defendió el proceso electoral que lo llevó a la presidencia y aseguró que «todas las corrientes políticas de nuestro país tienen libertades».
Nuevos acuerdos
Desde que la izquierda llegó al poder en Uruguay -con la presidencia de Tabaré Vázquez- el gobierno venezolano liderado por Chávez inició un proceso de acercamiento que se consolidó con el ascenso del exguerrillero Mujica.
En ese marco, ambos países instalaron en noviembre de 2010 la Comisión Binacional de Planeamiento y Seguimiento Estratégico (COBISEPLAE), para impulsar una amplia agenda de cooperación. Este martes, las delegaciones de los dos países firmaron una decena de acuerdos de cooperación en las áreas de defensa, salud, energía y puertos.
Las exportaciones uruguayas a Venezuela aumentaron 64% entre 2010 y 2012, año en el que el país caribeño se transformó en el cuarto destino de las ventas uruguayas de bienes. En contrapartida, Uruguay -importador neto de crudo- le compra a Caracas entre el 45% y el 50% del petróleo que adquiere, gran parte a precios subsidiados, gracias a un acuerdo de 2005.
En el marco de este acercamiento, el mes pasado Uruguay solicitó en Caracas su ingreso al sistema monetario Sucre, unidad contable de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), para operaciones comerciales.
El pequeño país sudamericano también ha recibido fuertes donaciones de Caracas, entre las cuales se destacan 20 millones de dólares al Hospital de Clínicas (público), medio millón de dólares para la construcción de un centro cívico en Pueblo Bolívar (en el departamento de Canelones, a 92 km de la capital) y ayudas a cooperativas de trabajadores.
AFP