Pegaso es un pequeño cubo de 2,1 kilogramos de peso, da la vuelta a la Tierra de polo a polo y pasa aproximadamente 37 minutos en eclipse y 65 minutos en iluminación
La Agencia Espacial Civil Ecuatoriana (EXA) informó que el próximo 16 de mayo empezará a difundir por internet las imágenes de vídeo de la tierra captadas a través de su nanosatélite Pegaso, el primero que Ecuador puso en órbita el pasado 26 de abril.
Ronnie Náder, director de EXA, indicó a diversos medios que el jueves de la próxima semana empezarán las transmisiones «en vivo» de Pegaso, «para Ecuador y para el mundo», luego que se hagan ciertos «ajustes» a la cámara del satélite para «mejorar la imagen, que sea más clara, más nítida, que los blancos sean más definidos».
«En este momento ya tenemos el enlace de vídeo de Pegaso», pero «queremos que transmita al doble de potencia», lo que supone un consumo mayor de energía, explicó el cosmonauta ecuatoriano.
El satélite se alimenta de energía solar y para «pasar a Pegaso a un modo de transmisión de alta potencia» se requiere que sus baterías estén completamente recargadas, añadió.
Las transmisiones del pequeño satélite, de 10 centímetros cúbicos de volumen, se efectuarán «sólo cuando esté en el rango de Ecuador», es decir, cuando pase por la órbita del país, dijo Náder.
La señal de vídeo será recibida en la estación «Hermes-A», el centro de control de EXA ubicado cerca de la ciudad portuaria de Guayaquil, en el suroeste de Ecuador, que «inyectará» la imagen a internet para su acceso libre y gratuito.
Pegaso, un pequeño cubo de 2,1 kilogramos de peso, da la vuelta a la Tierra de polo a polo y pasa aproximadamente 37 minutos en eclipse y 65 minutos en iluminación, según del director de EXA.
Dicho satélite fue al espacio el pasado 26 de abril a bordo de un cohete no tripulado LM2D, lanzado desde el centro espacial de Jiuquan, situado en la provincia china de Gansu.
En la elaboración del nanosatélite ecuatoriano, que tardó en construirse un año, y su gemelo, Krysaor, que se lanzará en agosto próximo desde Rusia y cuya elaboración tomó unos dos meses, EXA y varias empresas privadas invirtieron 80.000 dólares.
De su lado, el Estado ecuatoriano aportó con unos 700.000 dólares para el lanzamiento, seguros, logística y pruebas de certificación de ambos satélites.
Ese satélite, construido íntegramente en Ecuador, ha sido puesto en el espacio con fines educativos y científicos.
Agencias