La celebración del día de las madres, que supone una fecha de felicidad y festejo, no lo es tanto para quienes no decidieron poseer este título a temprana edad.Venezuela encabeza la lista de embarazos juveniles de Suramérica, cifra que no disminuye a pesar de los programas que buscan reducir esa incidencia
Karina hoy tiene 18 años, su bebé -a quien decidió llamar con una combinación de nombres que le gustaban- está por cumplir sus tercer aniversario. Ella quedó embarazada a los 15 años de su novio del liceo, con quien no llegaba a los cinco meses de relación.
Él fue su primera vez, pero no concibió su criatura en el primer intento, fue después de muchas tardes cuando al salir de clases, se escabullían a la casa del joven que estaba siempre sola, ideal para encuentros que lejos de ser románticos, eran actos que mezclaban una errada creencia de “independencia, rebeldía y estupidez”, como ella misma los describe con su nata capacidad de oratoria y poca timidez que deja sorprendido a más de uno.
Ahora Karina Pacheco –nombre ficticio para preservar su identidad- es madre soltera, trabaja en un supermercado y no llegó a ser bachiller. Cuando se le pregunta por qué no se protegió, asegura que conocía los métodos anticonceptivos, pero no pensaba en las consecuencias en ese momento.
Y aunque efusivamente dice que su hijo “es su razón de ser” y que no se arrepiente de ser madre, resalta que si alguna vez lo hubiese planificado, tendría su bebé a “como a los 25 años”.
También explica que este domingo Día de las Madres, hará los mismo de siempre: ir a trabajar hasta volver a casa a cuidar al niño y ver televisión. “Quizás logre comprarle algo a mi mamá, pero para mí no hay mucho qué celebrar, ni condiciones para hacerlo”, apunta fiel a su sinceridad.
El papá vive en el mismo lugar, aquel que una vez fue “su nidito de amor”, también dejó la escuela pero nunca se responsabilizó por su criatura.
Primero en Suramérica
Historias como las de Karina se repiten a lo largo del territorio nacional, lo que explica el porqué Venezuela tiene la mayor incidencia de embarazos no planificados en adolescentes de Sudamérica, situación que no sólo persiste sino que va en aumento, de acuerdo al Fondo de Población de las Naciones Unidas.
En el país, una de cada cinco mujeres menores de 20 años ya han sido madres, lo que representa el 21% de los nacimientos anuales, que incluyen a niñas entre los 12 y 14 años de edad iniciadas sexualmente, aunado al hecho de que de cada 10 jóvenes, nueve conocen los métodos anticonceptivos pero sólo uno lo usa.
Según la coordinadora de educación de la Asociación Civil de Planificación Familiar (Plaflam), Nelmary Díaz, existen muchos factores que influyen a este escenario, como la necesidad de una educación sexual integral en la educación que esté integrada desde un principio de la escolaridad, iniciando desde preescolar hasta el bachillerato.
“Generalmente tenemos una educación sexual negativa, por lo que el sistema integral debería aplicarse y verse de forma continua. Además, su educación no sólo debe ser desde la perspectiva biologicista sino que debe ir mas allá y no quedarse en las escuelas , sino que la formación también debe llegar desde la familia y la sociedad”, explicó.
Patrones que señaló, generalmente no se dan en el país, ya que en la cultura venezolana la sexualidad es vista como un tabú y por lo tanto, padres y los docentes no tienen herramientas para informar a los adolescentes.
Finalmente, dijo que la institución que representa tiene proyectos y servicios “amigables” para la atención de jóvenes y madres adolescentes, recursos que también otorga el Estado, pero que lamentablemente no son utilizados por los elevados niveles de desinformación.
Derecho a la salud sexual
Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente (Lopna), en su artículo 50 establece que los jóvenes tiene derecho a la educación e información sexual dentro de la confidencialidad y de libre consentimiento, es decir, pueden acudir a expertos sin la autorización de sus representados a partir de los 14 años.
“Artículo 50. Salud Sexual y Reproductiva. Todos los niños y adolescentes tienen derecho a ser informados y educados, de acuerdo a su desarrollo, en salud sexual y reproductiva para una conducta sexual y una maternidad y paternidad responsable, sana, voluntaria y sin riesgos (…) Estos servicios y programas deben ser accesibles económicamente, confidenciales, resguardar el derecho a la vida privada y respetar su libre consentimiento, basado en una información oportuna y veraz. Los adolescentes mayores de 14 años de edad tienen derecho a solicitar por sí mismos y a recibir servicios”
Solicita ayuda
Quienes deseen obtener información sexual oportuna y de forma confidencial, la Asociación Civil de Planificación Familiar (Plaflam) ofrece una serie de planes para jóvenes donde tratan temas como salud sexual y salud reproductiva, prevención de embarazo adolescente, métodos anticonceptivos, entre otras. Para mayor información, ponen a disposición los siguientes números y direcciones.
Petare. Calle la Paz, Casco Colonial, Calle Madeleine (detrás del Peréz de León) (0212) 2778544/ 2710244
Altagracia. Av. Este, entre esquinas Jesuita y Maturín, Altagracia, Caracas. (0212).5647023/ 4101/ 9824/ 5620153
Las Acacias. Avenida Minerva, Caracas, Venezuela (0212) 693-5262
Ciudadanos opinan…
¿Educa a su familia sobre sexualidad?
Aislar Calsadilla: “Por supuesto, sobretodo sobre la abstención y esperar la madurez necesaria para de tener relaciones sexuales. Hay que dejar el tabú”
Beatriz Alarcón: “Sí, pero más allá de hablar sobre métodos de anticoncepción, se debe enfatizar en reforzar los valores familiares y la responsabilidad”
Yelitza Zambrano: “Claro, y debe iniciar desde temprana edad con el lenguaje adecuado para cada etapa. La educación desde el hogar es esencial e importante”
Por: Anabel Barrios Díaz / e-mail: abarrios@diariolavoz.net