La ciudad de unos 20 mil habitantes y sitiada desde hace semanas por las fuerzas gubernamentales, tiene una importancia estratégica porque en la costa se concentran los leales al régimen
JERUSALÉN.- Las fuerzas del régimen sirio, con la ayuda del Hezbolá, recuperaron la estratégica ciudad de Qusair, cerca de la frontera libanesa, tras lanzar la mayor ofensiva contra los rebeldes, con un saldo de más de 40 muertos y decenas de heridos.
El ejército del presidente Bashar al-Assad lanzó ataques aéreos y terrestres con el fin de recuperar el control de Qusair, en el occidente del país, donde los insurgentes habían resistido el asedio por semanas.
Qusair, de unos 20 mil habitantes y sitiada desde hace semanas por las fuerzas gubernamentales, tiene una importancia estratégica porque en la costa se concentran los leales al régimen, incluidos los alauitas, seguidores de una rama chiíta a la que pertenece al-Assad.
Entre 40 y 50 muertos
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos (Osdh) precisó que 16 personas habían muerto, incluidos rebeldes, sin embargo otros medios de comunicación dan cuenta de entre 40 y 50 muertos y unos 450 heridos.
Según el Osdh, las tropas sirias están apoyadas por combatientes de la milicia chiíta Hezbolá, un aliado clave del régimen de Damasco.
Tras cruentos combates, las tropas sirias entraron este domingo en el centro de Qusair, bastión de los rebeldes en la provincia de Homs, donde tomaron el control e izaron la bandera en la plaza principal y del edificio de la municipalidad, según fuentes militares sirias.
“El ejército sirio controla la principal plaza de Qusair en el centro de la ciudad, así como los edificios cercanos, entre ellos el de la municipalidad, donde los soldados han colocado una bandera siria” indicaron.
Más de 40 integrantes
En esa operación, las tropas del Ejército han abatido a más de 40 integrantes del grupo Frente Al-Nusra, durante una operación de limpieza en la ciudad de Qusair, informaron activistas de la oposición.
En los últimos meses, Qusair fue escenario de intensos combates entre los insurgentes y las tropas del presidente al-Assad, que la consideran estratégica porque une la capital, Damasco, con la costa.
Las fuerzas leales al régimen sirio continúan sus operaciones de limpieza de “terroristas” en diversas áreas del país, con el objetivo de poner fin a los actos violentos de los hombres armados contra el gobierno y el pueblo sirios.
Desde el 15 de marzo de 2011, Siria es escenario de una revuelta popular que se convirtió en una guerra civil, las cuales han dejado más de 94 mil muertos, según cifras del OSDH.
Agencias