El intérprete de «La soledad» explicó que hace tres semanas recibió la llamada de la producción de «Forever Tango»
El salsero Gilberto Santa Rosa está inmerso en una «nueva aventura» que le llevará a debutar en julio en Broadway, la meca del teatro, donde será parte del musical «Forever Tango». «Todavía no me lo creo y hasta que no me vea cantando en ese teatro no me lo voy a creer, pero estoy muy contento, muy honrado», dijo ayer a medios el artista puertorriqueño, quien tendrá que residir durante al menos un mes en Nueva York.
«Forever Tango», del creador argentino Luis Bravo, que ha batido récords a nivel internacional, se presentará a partir del 9 de julio en el teatro Walter Kerr y tendrá como cantante al «Caballero de la salsa», cuya participación con el musical se extenderá hasta el 28 de ese mes.
El intérprete, que sigue los pasos de sus compatriotas Ricky Martin y Ednita Nazario, aseguró que para él es muy emocionante estar en Broadway «por la importancia que tiene Nueva York, que sigue siendo la capital del mundo, y un lugar donde los latinos siempre te tratan como si hubiera llegado un familiar».
«He cantado en muchos sitios pero la dinámica del teatro es diferente. Voy a cantar pero hay una preparación y unos ajustes que hacer. Para un artista es muy interesante a nivel de experiencia para crecer y enriquecer la carrera», indicó el sonero, que actuó en Puerto Rico en 2003 en la reposición del musical «La verdadera historia de Pedro Navaja».
El intérprete de «La soledad» explicó que hace tres semanas recibió la llamada de la producción de «Forever Tango», con cuyos miembros se reunirá a partir de hoy para ultimar detalles.
«No he visto el espectáculo pero conozco el proyecto», agregó Santa Rosa, que ha cosechado grandes éxitos en la salsa y para nadie es un secreto su pasión por los boleros, género del que lanzará este año un disco de temas inéditos y de éxitos.
Pero, por ahora, ese proyecto aguardará ya que durante tres semanas sus seguidores le verán dedicado al tango, un género que dice no les ajeno y que descubrió cuando era niño con el disco que grabó en la década de 1960 El Gran Combo de Puerto Rico.
«He cantado tangos como no tienes idea», dijo entre risas el artista, que llegó el pasado lunes a Nueva York desde Suiza.
Indicó, además, que cuando se presenta en Argentina canta al menos dos tangos por deferencia a su público.
Tango clásico
«Tengo cierta preferencia por el tango más clásico», dijo el cantante, que se confesó admirador del argentino Roberto Goyeneche (1926-1994) reconocido por su calidad interpretativa y su forma particular de frasear las melodías del tango, así como Gardel, «que es una inspiración y escuela para muchos cantantes».
«El tango no es ajeno para mí. Dentro de toda la responsabilidad que representa estar ahí, también me voy a divertir mucho. Esto es una gran oportunidad, lo agradezco mucho y espero hacer el mejor papel que pueda», aseguró.