BRUSELAS. Los ministros de la Unión Europea se mostraron profundamente divididos el lunes en torno a la posibilidad de disminuir las sanciones contra Siria para permitir el envío de armas a los insurgentes que combaten al régimen del presidente Bashar Assad.
Francia agregó urgencia al debate al indicar que hay síntomas crecientes de que se están utilizando armas químicas en el conflicto.
Los cancilleres de la UE reunidos el lunes en Bruselas encaran el vencimiento del plazo sobre el embargo de armas a Siria, que expirará el viernes. Si no se alcanza un nuevo acuerdo, cada país podrá decidir de forma independiente si envía armas a los insurgentes.
Gran Bretaña fue la más inclinada a relajar el embargo, pero encara una sólida oposición de otros miembros como Austria, para quienes el envío de más armamento sólo servirá para aumentar los muertos en Siria y perjudicar la reputación de la UE como mediadora de paz.
Más de 70.000 personas han muerto desde que comenzó el alzamiento popular contra Assad en marzo del 2011. El mandatario ha utilizado armas pesadas contra facciones insurgentes que sólo cuentan con armamento ligero.
El canciller francés Laurent Fabius dijo el lunes que hay más indicios que nunca de que en la guerra civil de Siria se están utilizando gases venenosos. Francia indicó que ha examinado esas informaciones desde principios de mes.
«Hay indicios más firmes y mejor demostrados del uso local de armas químicas. Tenemos que verificar esto y lo estamos haciendo con nuestros socios», dijo Fabius. Sin embargo, no aclaró cuál de las partes ha sido acusada de usar dichas armas.
Los cancilleres de la UE siguen empantanados en la forma de enmendar el embargo.
«Las posiciones están muy distanciadas», dijo Guido Westerwelle, el ministro de Relaciones Exteriores alemán.
Según Fabius, desea alcanzar una solución negociada «en la que tengamos un consenso europeo, en el que los rebeldes puedan obtener las armas necesarias y en el que las armas puedan ser controladas».
Las naciones de la UE se han opuesto firmemente a Assad en la guerra civil y han aumentado paulatinamente las medidas restrictivas contra su régimen, incluyendo la limitación de las visas y las sanciones económicas.
En febrero, las 27 naciones del bloque enmendaron igualmente el embargo armamentista para permitir el envío de material no letal y medicinas a fin de proteger a la población civil siria. De no ser renovado, todo ese plan de medidas expirará a fines de mayo.
AP