Mecanismos de integración socio-económica como la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba), Petrocaribe y el Sistema Unitario de Compensación Regional de Pagos (Sucre) han hecho posible la creación de un nuevo modelo de unión suramericana y caribeña para fortalecer la paz en la región, destacó este lunes el canciller venezolano, Elías Jaua.
Subrayó que estos esfuerzos progresistas surgidos en la última década han permitido hacer de esta zona la única del mundo que está exenta de conflictos militares entre naciones.
«América Latina es una región de paz, para la vida, libre de armas nucleares y así debe ser preservada», precisó, durante la instalación de la reunión de evaluación de acuerdos económicos y comerciales suscritos entre Ecuador y Venezuela.
Agregó que la unión suramericana y caribeña está basada en la complementariedad, solidaridad y defensa de los derechos de los pueblos, con el necesario componente comercial para el desarrollo integral de las naciones.
El jefe de la diplomacia venezolana recordó que la región cuenta con estabilidad política, crecimiento económico y el éxito de mecanismos como el Sucre, que posibilitan el intercambio comercial basado en la no transacción con el dólar, sino con una moneda de uso común.
Por su parte, el canciller de Ecuador, Ricardo Patiño, destacó que el 12 de junio se realizará el primer Consejo de Ministros del Banco del Sur.
«Por primera vez, después de décadas de recibir las pésimas recomendaciones y exigencias, los dañinos consejos e imposiciones del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial, finalmente siete países de América del Sur constituyen este banco», remarcó.
Patiño también hizo referencia a la necesidad de reformar la Organización de Estados Americanos (OEA) y el Sistema Interamericano de Derechos Humanos (SIDH).
Asimismo, saludó el éxito que ha tenido el Sucre en la relación entre Venezuela y Ecuador, al tiempo que dijo podría convertirse, a mediano plazo, en una moneda única entre América Latina y el Caribe.
AVN