El mandatario local reconoció que “por las aceras de la entidad ya no se puede caminar”, y estableció un plazo de 15 a 20 días para organizar a los vendedores informales
Este jueves el alcalde del municipio Lander, Julio César Marcano, se reunió con los buhoneros de esta entidad para establecer algunas normas para el desempeño de las labores de este sector.
Como se sabe, los proliferación de trabajadores de la economía popular en la entidad se ha convertido en un grave problema, básicamente porque el casco central de Ocumare se encuentra “tomado” por los informales; incluso la Cámara Municipal ha realizado varios exhortos al ejecutivo local para que los organice.
Durante el encuentro, Marcano anunció que se realizará un censo de los informales, el cual se cruzará con el registro electoral para constatar que el trabajador resida en el municipio, toda vez que uno de los requisitos para ejercer la buhonería en la entidad es que viva en la misma.
“Hemos notado que muchos informales de Cua y Charallave están laborando en Ocumare y a ello debemos ponerle un coto”, dijo el burgomaestre, quien además resaltó que aquellos que “pasen la prueba de domicilio” serán carnetizados y luego sus puestos, de un máximo de 2 metros, demarcados. Estableció un plazo de 15 a 20 días para organizarlos.
Prohibiciones
El mandatario local fue enfático al señalar que está terminantemente prohibida la ubicación de camiones con verduras y frutas en el casco central, ya que su permanencia genera caos en el tránsito automotor. “Hemos notado que además del vehículo, el trabajador abarca hasta seis metros del espacio público”, señaló Marcano, acotando que los vehículos pesados deberán descargar la mercancía antes de las 7 de la mañana y retirarla después de las 7 de la noche. Se planteó además que el día de parada de los buhoneros será el miércoles.
Marcano reconoció que por las aceras de Ocumare ya no se puede ni caminar y atribuyó la proliferación de informales, al crecimiento poblacional del municipio”. “Por ello queremos organizarlos para que los peatones y conductores recuperen sus espacios, sin que los buhoneros pierdan su derecho al trabajo”, dijo el jefe del ejecutivo local, quien refirió que el presidente de Corpomiranda, Elías Jaua, se comprometió a gestionar la construcción de un mercado popular, para lo cual ya han visto tres terrenos, no obstante aclaró que esta solución será a largo plazo.
Irrespeto a la norma
El alcalde recordó que está prohibida la instalación de trabajadores informales en espacios públicos como la plaza Bolívar, frente a la iglesia de Ocumare, la sede del gobierno municipal y la Casa del Pueblo, sin embargo esta medida ha sido la más vulnerada por los buhoneros. Vale destacar que un clamor popular es que las calles y avenidas del casco central de Ocumare vuelvan a estar despejadas, como en otrora.
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