Menos de un gol por partido tiene la Vinotinto en las eliminatorias para Brasil 2014
La cuesta se ve empinada. El intento venezolano de llegar por primera vez a un mundial de fútbol se ha complicado, y entre las razones se cita la falta de contundencia como local. A la vista inmediata, en ese sentido, los resultados negativos en Puerto La Cruz y Cachamay frente a Chile (0-2) y Uruguay (0-1).
Pero asimismo, el análisis de esos resultados y el aspecto global de la competencia vinotinto en la eliminatoria suramericana para el mundial Brasil 2014 presentan la evidencia de una carencia de definición, de capacidad goleadora, indispensable para salir adelante.
A la fecha, en 13 partidos disputados, Venezuela solo ha hecho diana en 10 oportunidades, es decir menos de un gol por jornada (0,7), lo que le coloca solamente por encima de Paraguay, último de la tabla, que ha logrado 9. Incluso Perú y Bolivia, en la puntuación por debajo de la Vinotinto, llevan 12 y 15, es decir que esta es la octava del circuito en materia de anotación.
La defensa nacional, tan criticada como suele ocurrir cuando hay una falla que se transforma en gol contrario, ha estado en bueno tono, al extremo de que es la cuarta que menos ha permitido, con 14, mejor que Chile y Uruguay (21), ambos por encima en la tabla.
Argentina, Colombia y Ecuador tienen cifras positivas en su balance de goles anotados y recibidos (16, 14, 5), Chile está en 21-21, Uruguay en -3 (18 y 21), lo que le permite el quinto lugar sobre Venezuela (-4), Perú, que llegó a 16 puntos y se acercó a Venezuela, tiene -5, Bolivia -9 y Paraguay -14.
A pesar de que el goleador José Salomón Rondón se ha hecho sentir en cada partido (y está entre los mejores anotadores de la eliminatoria), la ofensiva venezolana ha mostrado poca profundidad. En ocasiones crea oportunidades de gol y no las puede concretar, pero generalmente falta entendimiento entre las líneas y alimentación a los delanteros.
El único fijo en esa línea es Rondón. En ocasiones, la participación de futbolistas con habilidad y desmarque con la pelota como Josef Martínez han dado sensación de mejor llegada, en otras han sido utilizados arietes como Fernando Aristeguieta o el rápido Richard Blanco, y también ha estado, con poca regularidad, Miku Fedor. Pero el seleccionador no ha encontrado una pareja estable ni el equipo esa profundidad para ser amenaza permanente sobre las defensas, más allá de la dependencia de las jugadas a balón parada.
A la Vinotinto se le exige saber tener el balón, ser firme en la defensa y ganar de local. Ahora es preciso sumar además en Chile, aparte de esperar otros resultados.
Pero para seguir adelante es indispensable encontrar la ruta del gol.
Armando Naranjo
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