El ministro boliviano de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, habló en ese sentido en el Congreso del programa llamado «Bolivia cambia, Evo cumple»,
El Gobierno boliviano afirmó que un programa de inversiones financiado en su mayoría por donaciones de Venezuela, que sumaron 404 millones de dólares, fue un mecanismo para contener una violencia que podía conducir a una «guerra civil».
El ministro boliviano de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, habló en ese sentido en el Congreso del programa llamado «Bolivia cambia, Evo cumple», al defender las inversiones que se hicieron con esos fondos para financiar más de 4.500 obras desde el 2007.
Quintana dijo que, antes del Gobierno del presidente Evo Morales que comenzó el 2006, Bolivia vivía un divorcio entre el Estado y la sociedad que iba a conducir a graves escenarios de violencia social.
«De no resolverse el divorcio entre el Estado y la sociedad nos íbamos a ver enfrentados en una guerra civil. Esto iba a conducir a una espiral de violencia catastrófica para el país y teníamos que operar rápidamente para impedir esa catástrofe en el país», dijo.
«Y el mecanismo más rápido para prevenir la violencia, para empezar a reencontrar al Estado con el ciudadano, el mecanismo más rápido fue el ‘Evo cumple'», agregó el ministro.
Sostuvo que ante el éxito, este programa se convertirá en una política estatal porque impidió, impide y seguirá impidiendo «las relaciones de conflictividad entre la sociedad y el Estado».
No obstante, la oposición cree que se trata de inversiones que no tiene transparencia e incluso encubren actos de corrupción.
Financiamiento
desde 2007
El programa se comenzó a financiar en 2007 con las donaciones venezolanas miles de obras de infraestructura deportiva, social, educativa, sindical, sanitaria, entre otras, mediante cheques que Morales entrega de forma directa a los beneficiarios.
El mandatario reveló hace unos días que con parte del dinero del programa también se compraron nueve aviones militares.
El programa fue financiado en el período 2007-2011 con 404 millones de dólares donados por Venezuela y a partir del 2011 Bolivia puso de su tesoro otros 266 millones de dólares, según el informe detallado de Quintana.
En total, el programa «Bolivia Cambia, Evo Cumple» ha gastado hasta ahora 670 millones de dólares, en obras que tuvieron un impacto social y posibilitaron la creación de cerca de 1 millón de empleos en el país, entre directos e indirectos.
Quintana destacó que «la donación, la solidaridad, el apoyo del pueblo venezolano» llegó a varias regiones de Bolivia y volvió a negar que se traten de préstamos que se deben devolver a Venezuela, como sostuvo semanas atrás la oposición.
La donación venezolana fue posible por los convenios de cooperación firmados entre el entonces presidente venezolano, Hugo Chávez, y su homólogo, amigo y aliado boliviano Morales.
Tras su informe al Parlamento, Quintana fue respaldado por el partido gobernante, el mayoritario Movimiento al Socialismo (MAS), ante las criticas de la oposición que insistió en una supuesta falta de transparencia en la inversión de esos fondos.
Durante la sesión, los opositores expusieron fotografías gigantes para mostrar que algunas de esas obras como estadios, escuelas o centros deportivos, varios de ellos bautizados con el nombre de Morales, están sin concluir o abandonados.
Agencias