Los cuerpos fueron encontrados cerca de Gila Bend, a 112 kilómetros al norte de la frontera.
Las autoridades de Arizona encontraron este jueves cuatro cuerpos humanos abandonados en el desierto. Los primeros indicios señalan el congelamiento como causa de muerte, de acuerdo con Victor Brabble, vocero de Aduana y Protección Fronteriza de Estados Unidos.
“Es probable que sean inmigrantes tratando de cruzar a Estados Unidos”, dijo. “Sin embargo, no tenemos suficientes elementos para llegar a esa conclusión en este momento”.
Los cuerpos fueron encontrados cerca de Gila Bend, en Arizona, a 112 kilómetros al norte de la frontera. No han sido identificados, de acuerdo con la oficina del alguacil del Condado de Maricopa.
Los inmigrantes a menudo tratan de cruzar el terreno áspero del desierto de Sonora, donde se presentan muchas muertes relacionadas con las altas temperaturas, dijo Brabble este jueves.
Abogados a favor de los derechos de los inmigrantes han advertido una disminución de los cruces fronterizos, las muertes están al tope porque el reforzamiento de la seguridad obliga a las personas a usar rutas más peligrosas. Funcionarios de la Patrulla Fronteriza han dicho que es necesario aumentar la seguridad para evitar a los contrabandistas.
Según un reciente estudio del Instituto Binacional de Migración de la Universidad de Arizona, más de 2,230 inmigrantes han muerto en la zona del desierto a lo largo de la frontera durante los últimos 22 años.
En la región fronteriza del condado de Pima, en Arizona, las muertes de los inmigrantes no identificados en el desierto se han vuelto tan comunes que la Oficina de Médicos Forenses creó un sitio de internet para rastrear a los fallecidos y facilitar que sus familias recuperen sus restos.
El jueves, un grupo bipartidista de senadores anunció una propuesta para agregar más de 20,000 agentes fronterizos y completar 1,126 kilómetros de valla fronteriza a lo largo de la frontera con México, así como desplegar 3,200 millones de dólares en mejoras tecnológicas similares a las usadas por las fuerzas estadounidenses en Iraq y Afganistán.
Agencias