La noche de este pasado miércoles 26 de junio, falleció el Caracas el abogado Juan Cancino Carpio Orta, «Juancho», para los centenares de amigos que supieron valorar su amistad, su entrega a las mejores causas, a demás de su inconmensurable amor por la guarenidad.
Juancho fue un enamorado de la amistad y eso le valoró entre quienes nomás al estrechar su mano en una presentación, sabían que detrás de la imagen de ese hombre corpulento, de barba blanca e infaltable sombrero, había una persona noble, siempre presta a lo servicial, sin que mediara interés de por medio. Así se lo conoció en Guarenas y donde quiera que dejara huellas en su trajinar por los escenarios que supieron apreciar su formación musical, que de lo empírico pasó a la más delicada formación de selectísimos maestros de la guitarra y el teclado.
Una noche, tarde o mediodía con Juancho acompañado de su guitarra o teclado, se convertía en horas de felicidad al escucharle entonar desde interpretaciones clásicas, hasta lo más popular del cancionero criollo, sin faltar el salero que ponía a los pasodobles, muchos de ellos de su autoría.
Hace pocos meses la canalla se impuso y sufrió la vejación de ver destruido su creación local de un lugar para los recuerdos, en el que poco a poco había convertido su lote de la calle Bermúdez. Su muerte deja un gran vacío, pero nos queda, junto a innumerables amigos, la satisfacción de haber disfrutado de su amistad y de sus canciones. Paz a su alma.
ACB