El capitán Thiago Silva levantó el trofeo, que hace que los aficionados empiecen a pensar en el hexacampeonato mundial como anfitrión en 2014. Poco después los jugadores mostraron sus medallas y la copa en la tradicional vuelta olímpica.
«El campeón volvió», repetían los más de 73.500 aficionados presentes.
Fred abrió el marcador a los 2 minutos de juego. Aumentó Neymar a los 44 y otra vez Fred puso el tercero recién iniciado el complemento a los 47 minutos.
«Tenemos un buen equipo, pero aún tenemos que probar mucha cosa», dijo el seleccionador Luiz Felipe Scolari en la rueda de prensa después del partido.
Era un día para la historia: el 30 de junio de 2002, Felipao ganó el quinto título mundial de Brasil en Corea del Sur-Japón. Once años después, el mismo técnico conquistó la cuarta Confederaciones, tercera consecutiva, y se colocó con legitimidad la camiseta de favorito al Mundial del próximo año.
El resultado rompió además el invicto de España de tres años y 29 partidos oficiales sin conocer la derrota. Su último revés fue ante Suiza 1-0, el 16 de junio de 2010, en el primer partido del Mundial de Sudáfrica, en el que se consagró campeón.
«De vez en cuando es importante perder», dijo el entrenador español Vicente Del Bosque, que no obstante aseguró que sus «antecedentes» le hacen ser «optimistas» de cara al Mundial de 2014.
Desde el pitazo inicial las instrucciones de ‘Felipao’ se cumplieron al pie de la letra: aprovechar la condición de local y presionar con todo los primeros minutos. Y así llegó el primer gol, temprano a los 2, cuando los de Vicente del Bosque, contra las cuerdas, no habían siquiera podido acomodar su juego.
Hulk centró al área, Fred y Neymar pelearon la pelota con Piqué y Arbeloa y cuando se pensaba la jugada había acabado, el ’10’ tocó atrás para el «hombre gol» que caído en el gramado remató al arco de Íker Casillas, que nada pudo hacer.
El Maracaná, que desde la propia interpretación del himno nacional demostró que jugarían bien su papel de jugador ’12’, rompieron sus gargantas con cada gol, reclamaron con furia cada falta y corearon los nombres de los héroes del partido.
El juego de Brasil fue calmado e inteligente, intercalando intensidad con defensa.
Neymar, el hombre del torneo, fue brillante, Oscar inteligente, Hulk fuerte, Fred oportuno y David Luiz impenetrable.
España irreconocible
‘La Roja’ trataba de organizar su ‘tiqui-taca’ con toques cortos, pero eran desarmados por la zaga ‘amarelinha’.
Pocas fueron las amenazas reales de campeón mundial, la mayoría de ellas de Andrés Iniesta.
David Luiz reescribió la historia a los 41. El 1-1 estaba cantado. Pedro quedó solo en el área y consiguió dominar a Julio Cesar, pero de la nada apareció el ‘4’ auriverde al rescate deslizándose con un patadón que la mandó fuera del campo por la línea de meta.
«El momento del juego fue el gol que David Luiz salvó, no fue el 3 a 0, el 2 a 0 (…). El momento fue aquél», dijo el técnico.
Y ahí vino el segundo de la noche, un golazo de Neymar.
El ’10’ había tocado para Oscar, que acorralado por la zaga ibérica, se la regresó para invadir el área y mandar un potente zurdazo alto por el palo que cubría Casillas para perforar la red.
Segundo tiempo y misma estrategia: dos minutos después del silbato llegó el 3-0 que sentenciaba la goleada.
Hulk centró por la izquierda a Neymar, que la cedió a Fred para que con clase la empujara a la esquina derecha del arco.
El ‘9’ amarelinho se colocó como artillero global del equipo con nueve tantos, seguido por Neymar con siete.
El descuento estuvo en los pies de Sergio Ramos que erró un cobro de penal -desviado a la izquierda- tras falta en el área de Marcelo sobre Jesús Navas. No era la noche de España.
Y como si fuera poco, una falta de Gerard Piqué sobre Neymar le costó la roja directa. El público coreaba mientras salía el nombre de su novia Shakira, presente en el Maracaná.
Y así sonó el silbato final y la celebración en el Maracaná. España se quedó sin el único título que le falta. ¿Algo bueno? Quizás, si se cree en brujas, es que podrá evitar la presunta maldición de que quien gana la Confederaciones, pierde el Mundial. AFP