«Snowden, ¿te casas conmigo?», escribió hoy en twitter la ex espía rusa Anna Chapman, que saltó a la fama tras ser deportada en 2010 de Estados Unidos, lo que le valió ser condecorada por el presidente ruso, Vladímir Putin.
Chapman, que ejerce ahora de presentadora de televisión y estrella de las revistas sensacionalistas, se ofreció en matrimonio al exanalista de la CIA, Edward Snowden, que se encuentra en el aeropuerto moscovita de Sheremétievo desde el 23 de junio.
«NSA (Agencia Nacional de Inteligencia), ¿cuidarás de nuestros hijos?», pregunta otro mensaje colgado en la red social por la pelirroja.
Para poder contraer matrimonio con Chapman, Snowden tendría que pedir asilo político en Rusia, ya que casi la totalidad de países a los que ha enviado solicitudes ya han manifestado su rechazo.
Pero para quedarse en Rusia tendrá que aceptar la condición que le ha planteado el presidente ruso, Vladímir Putin, resumidas en el cese de sus filtraciones y toda actividad dirigida contra los intereses de los Estados Unidos, país al que calificó de «socio».
En julio de 2010 Chapman regresó, junto a otros diez agentes, a Rusia tras el mayor canje de espías con Estados Unidos desde el fin de la Guerra Fría, en el que Moscú entregó a cambio a Washington a cuatro miembros de los servicios secretos norteamericanos que cumplían condena.
Tras el escándalo, el Foreign Office británico decidió revocar la ciudadanía británica a Chapman, cuyos rudimentarios métodos de espionaje han sido criticados por ex agentes de los servicios secretos rusos y sus predecesores soviéticos.
EFE