La diputada opositora María Corina Machado, advirtió hoy a las empresas extranjeras sobre la amenaza de expropiación por parte del régimen de su país, del que dijo que «lo que no pueden controlar, intentan destruir».
«Aquellas empresas que piensen que no las van a tocar porque son muy grandes o porque un gobierno exterior las va a proteger, se equivocan», dijo Machado en una entrevista con EFE, tras exponer la situación en su país en el foro «Iberoamérica de cara al futuro: desafíos institucionales, políticos y económicos. El rol de los medios de comunicación», en la Casa de América, en Madrid.
«Estos regímenes, lo que no pueden controlar lo intentan destruir, quieren una sociedad dependiente del Estado porque así pueden ejercer un chantaje, primero económico, después político, emocional y finalmente espiritual», dijo Machado en la entrevista.
Recordó el caso de la empresa Agroisleña, fundada por españoles procedentes de las Islas Canarias y que se convirtió en el principal centro de financiación para pequeños agricultores de Venezuela, fue expropiada por el fallecido presidente Hugo Chávez, que la convirtió en Agropatria, «destruyendo generaciones y décadas de trabajo».
«Hoy en día, en Venezuela no hay semillas, no hay insumos, no hay producción, no hay empleo», dijo la diputada al subrayar que «el 80% de lo que comemos, lo importamos.
Además denunció que en mayo pasado el país registró la mayor subida de la inflación de su historia, un 6 %, que para los alimentos fue de un 10 %, lo que, según afirmó, lleva a «una situación de enorme conflictividad».
En el ámbito político, la diputada dijo que «hoy en Venezuela no hay democracia (…) estamos pasando el limite entre el autoritarismo y el precipicio del totalitarismo» y que la situación «está llegando a un extremo de una complejidad y una peligrosidad muy profunda porque coinciden tres dimensiones: la ilegitimidad, la ilegalidad y la incompetencia».
El partido oficialista hizo publica recientemente una grabación sobre una supuesta conversación entre Machado y el historiador venezolano Germán Carrera Damas, en la que la diputada habría dicho que comentó al Departamento de Estado de EEUU que la única forma de resolver la situación en su país sería mediante «un golpe de Estado o autogolpe».
Con la grabación, Machado dijo que fue violada su intimidad y aseguró que no tiene nada que ocultar «nosotros somos muy claros, cuando se trata de democracia hay que alzar las voces».
«Las intervenciones y las voces que queremos son las de los demócratas que alzan la voz y denuncian la ilegalidad y el atropello de los regímenes no democráticos del continente», añadió.
Preguntada sobre el apoyo de Washington a la oposición venezolana, respondió que los EEUU «han sucumbido en alguna medida a una preocupación de sentir que su participación puede ser vista y generar una reacción terriblemente adversa por llamarla injerencia o intervención».
También criticó organizaciones latinoamericanas como Unasur o la Organización de Estados Americanos (OEA), a la que tachó de haberse convertido en un «club de presidentes para protegerse unos a otros».
A la pregunta sobre si el Gobierno español brinda apoyo a la oposición venezolana, se limitó a afirmar que «del pueblo español sentimos apoyo».
«Nuestros pueblos están profundamente entrelazados y (una transición democrática en Venezuela) abrirá grandes oportunidades de inversiones e inversiones seguras en Venezuela, no inversiones como las que hoy están sujetas a un chantaje político moralmente inaceptable», añadió.
La Mesa de Unidad Democrática, que aglutina la oposición en Venezuela y que está liderada por Henrique Capriles, mantiene que este ganó las elecciones del pasado 14 de abril, que ha impugnado ante el Tribunal Supremo tras denunciar irregularidades de fraude.
María Corina Machado fue una de los parlamentarios de la oposición que resultaron heridos en una tumultuosa sesión en la Asamblea Nacional el 30 de abril, que la diputada califica de «golpe en el Parlamento».
EFE