James Comey, vicefiscal general entre 2003 y 2005, dijo a senadores estadounidenses en una audiencia que expresó estos puntos de vista mientras trabajaba para el Gobierno de George W. Bush
WASHINGTON. James Comey, el hombre nominado por el presidente estadounidense para ser el próximo director del FBI, dijo el martes que el uso del denominado «submarino» como técnica de interrogatorio es una tortura y un método ilegal.
Comey, vicefiscal general entre 2003 y 2005, dijo a senadores estadounidenses en una audiencia que expresó estos puntos de vista mientras trabajaba para el Gobierno de George W. Bush.
Sin embargo, Comey dijo que perdió la batalla para frenar algunas técnicas de interrogación de la CIA como el submarino y la privación del sueño contra combatientes enemigos.
«Cuando primero me enteré del submarino fue cuando me convertí en vicefiscal general. Mi reacción como ciudadano y como líder fue que esto es una tortura», dijo Comey. «Esto lo sigo pensando», agregó.
Comey elogió al actual director del FBI, Robert Muller, por asegurar que el organismo haya desechado esas prácticas.
«Y si yo fuera director del FBI, nunca tendría nada que ver con eso», sostuvo.
Grupos de derechos humanos y algunos ex agentes del FBI han instado a los miembros de la Comisión Judicial del Senado a preguntarle a Comey sobre por qué se mostró de acuerdo con un dictamen del 2005 del Departamento de Justicia que justificó el uso de algunas técnicas de interrogación, entre ellas el submarino, en algunas circunstancias.
Comey dijo que si bien al menos un memorando del Departamento de Justicia explicó cuándo el uso de estas técnicas de interrogación podrían ser legalmente justificadas, continuó planteando interrogantes acerca de si Estados Unidas debería estar utilizando estos métodos.
«Tal vez la cosa más importante que hice sobre este tema como vicefiscal general fue forzar, o tratar de forzar, una lucha para que se discuta acerca de si esto era el tipo de cosa que deberíamos estar haciendo como estadounidenses», dijo Comey.