Luego que el codo de Rafael Furcal explotara en el entrenamiento primaveral y comenzara la especulación de cambios, los jugadores de Cardenales de San Luis hablaron en gran forma de Pete Kozma. Ellos no hubiesen podido tener el tipo de corrida que tuvieron al final de la temporada pasada, según dijeron los otros Cardenales, sin Kozma jugando una defensiva sólida en las últimas semanas de la temporada. A principios de esta campaña, Kozma tuvo el promedio de bateo más alto con .276, el 28 de mayo.
Pero Kozma bateó .209 en junio, con OPS de .501, y recientemente recibió tres días libres. Bateaba .232 con OPS de .572 en general.
Fuentes indican que ha habido más discusiones sobre un posible intercambio que se habló previamente en la temproada baja: Asdrúbal Cabrera de los Indios a San Luis.
No está claro cuán avanzadas están estas negociaciones, si es algo conceptual o interno en este momento, y sin duda, es un acuerdo que se pudo haber hecho más fácilmente en la temporada baja, con más tiempo.
Pero es una situación que vale la pena observar, porque podría ser una transacción en medio de la temporada que haría sentido para ambos equipos. Para San Luis, Cabrera representaría una mejoría en el campocorto: tiene 27 años y batea a ambas manos, es un dos veces Todos Estrellas con poder y experiencia. Cabrera tiene OPS de .725 y ha demostrado su habilidad para jugar diferentes posiciones, razón por la cual los Yankees han preguntado en repetidas ocasiones por él. Sí, puede jugar como torpedero, pero también puede jugar en la intermedia o en la antesala, e incluso en la inicial, así que si los Yankees necesitan llenar un hueco por Derek Jeter o Álex Rodríguez o Robinson Canó -dependiendo de los desarrollos que se den por los acontecimientos por lesiones (Jeter y A-Rod) a las suspensiones por esteroides (A-Rod) a la salida por la agencia libre (quizás Cano)- Cabrera podría ser una opción. Cabrera se gana $6.5 millones anuales, y se ganará $10 millones el año que viene, antes de ser elegible para la agencia libre.
Los Indios están posicionados para considerar cambiarlo, porque si Cabrera es movido de equipo, ellos podrían cubrir su salida a corto plazo con Mike Avilés. Y, por supuesto, el cotizado prospecto boricua Francisco Lindor está subiendo por los diferentes niveles de las menores como la solución a largo plazo; batea .307 en Clase A alta este año, y apenas tiene 19 años.
Se presume que los Indios pedirían de vuelta al menos a un buen prospecto, alguien cercano a las Grandes Ligas, y los Yankees no tienen necesariamente mucho que escoger de la parte de arriba de su sistema de fincas. Pero los Cardenales sí tienen, particularmente pitcheo; su sistema de fincas es catalogado como el mejor en el deporte, y están repletos de buenos brazos jóvenes, como Shelby Miller y Trevor Rosenthal, que ya se graduaron a nivel de Grandes Ligas y se presume que no están disponibles, y Carlos Martínez y Michael Wacha que son brazos importantes en las menores, entre otros. (De hecho, Martínez acaba de ser subido para trabajar en el bullpen de San Luis, según escribe Derrick Goold).
Si los Cardenales reciben en cambio a Cabrera, su alineación, que ya es profunda, mejoraría aún más: San Luis se ubica en el primer lugar en la Liga Nacional en carreras anotadas, a pesar de su relativamente débil producción en el campocorto. Ellos batean .338 con corredores en posición de anotar de forma colectiva, algo que ayuda mucho.
Si los Indios reciben un buen prospecto lanzador por Cabrera, se uniría a un establo en crecimiento de opciones de lanzadores para Cleveland que incluye a Danny Salazar, quien brilló en su debut en Grandes Ligas el jueves; en seis entradas, mostró una recta por encima de las 95 mph y un cambio violento.
Los Indios tienen a Justin Masterson, Ubaldo Jiménez, Corey Kluber y Scott Kazmir ahora, y estarán recibiendo pronto al subestimado Zach McAllister. Desde el principio del año, Cleveland ha seguido creyendo que Trevor Bauer va a evolucionar, a pesar de sus problemas. Ya se verá si ellos estarán listos para hacer esa colección aún más profunda.