El veneno era su arma mortal
“Sé que todos han pasado por mucho dolor, todas las familias conectadas y lo siento y quiero agradecer a todos quienes me han estado apoyando esos seis años”. Estas palabras fueron pronunciadas por Velma Barfield antes de ser ejecutada por inyección letal en 1984.
Barfield, quien fue una desalmada asesina en serie, rechazó una última comida antes de ser ejecutada, prefiriendo una bolsa de palitos de queso y una lata de refresco. Vestía pijama de color rosa y un pañal para adultos cuando fue condenada a muerte y mientras estuvo en prisión se dedicó a cuidar de los otros reos y se había convertido en una devota cristiana.
De niña abusada
a homicida
Margie Velma Bullard nació el 29 de octubre de 1932 en Carolina del Sur, aunque se crió en Fayetteville, Carolina del Norte. Era hija de una familia granjera con muy pocos recursos económicos. Su padre abusaba físicamente de ella y su madre, al parecer, no hacía nada por impedirlo.
Al llegar a la adolescencia, se escapó de su casa y en 1949, con sólo 17 años, se casó con Thomas Burke, con quien tuvo dos hijos y aunque vivían humildemente en una pequeña granja, fueron felices hasta que Thomas sufrió una histerectomía, quedando con un dolor lumbar crónico. A raíz de esto, empezó a beber a diario, lo que desembocó en innumerables discusiones.
Comienzan las muertes
En abril de 1969, Velma salió de casa con sus hijos a hacer unas compras y al regresar se encontraron con que su hogar se estaba quemando. En su interior, se encontraba el cadáver carbonizado de Thomas y la investigación posterior concluyó que el incendio había sido fortuito, causado por la falla de algún electrodoméstico y que Thomas se hubiese salvado, si no hubiese estado borracho.
Fue particularmente extraño para la policía que, unos meses más tarde, la misma casa volvió a ser pasto de las llamas y esta vez había un seguro contra incendios. Velma contrajo matrimonio nuevamente en el año 1970 con un viudo llamado Jennings Barfield, quien fallecería unos meses más tarde a causa de complicaciones cardíacas, a pesar de que nunca había padecido del corazón.
En 1974 la madre de Velma, Lilliam Bullard, ingresó en un hospital con un cuadro clínico de vómitos, náuseas y diarrea intensa, reestableciéndose en una semana. En las Navidades, Lilliam volvería entrar al centro de salud con los mismos síntomas, aunque en esta ocasión falleció sólo unas horas después de ser ingresada. Por aquella época Velma salía con un hombre que falleció en un accidente de tráfico que las autoridades calificaron de sumamente extraño.
Durante 1976 Velma empezó a trabajar cuidando a un matrimonio anciano, Montgomery y Dollie Edwards. En ese invierno, Montgomery se sintió indispuesto durante una cena y fue a acostarse, pero no volvería a levantarse con vida. Un mes más tarde, Dollie de 85 años de edad, ingresó en un hospital con el mismo cuadro que la madre de Velma había experimentado dos años antes y también falleció en cuestión de horas.
En 1977 comenzó a trabajar para el matrimonio Lee, ya que la mujer, llamada Record, se había roto una pierna y necesitaba ayuda en las tareas del hogar. El 04 de junio, John Henry, el marido de Record, empezó a sentir unos dolores muy intensos en el pecho y en el estómago. Fue llevado urgentemente a un hospital, pero falleció en el camino, víctima del insecticida suministrado por Velma.
Arsénico en cervezas
Una vez restablecida Record, Velma dejó de trabajar para ella y se fue a vivir con Stuart Taylor, sobrino de la fallecida Dollie Edwards, con quien sostenía un romance. Acostumbrada a un nivel de vida que no se podía permitir, emitió cheques sin fondos a nombre de Stuart y como temía que éste se enterase, decidió echarle un veneno para ratas basado en el arsénico en las cervezas que le abría. El 03 de febrero de 1978, Stuart falleció.
Los médicos consideraron esta muerte muy extraña y una autopsia reveló que en el cuerpo de Stuart había una gran concentración de arsénico. Alertadas por esto, las autoridades decidieron exhumar los cuerpos de la madre de Velma y de Jennigs Barfiled, hallando en ambos concentraciones de arsénico.
Admite su culpa
Velma Barfield fue detenida y dejó muy sorprendidos a sus interrogadores al admitir que era culpable del asesinato de su madre, Lillie Bullard, así como de los de Dollie Edwards, John Henry Lee y su novio, Stuart Taylor.
En el juicio fue hallada culpable y sentenciada a muerte. El 02 de noviembre de 1984, Velma, quien entonces tenía 52 años, fue ejecutada mediante una inyección letal en la Prisión Central del Estado de Carolina del Norte, en Raleigh. Ella fue la primera mujer en ser ejecutada por ese método y su cuerpo fue enterrado en un pequeño cementerio de Carolina del Norte, cerca de su primer esposo, Thomas Burke.
Sospechoso deceso
En el año 1974, Margie Velma Barfield se hizo pasar por su madre, Lillie Bullard, de 64 años de edad y consiguió un préstamo. Consciente de que su madre se enteraría, compró un insecticida y espolvoreó la sopa de su progenitora con este veneno. Lillie murió a las pocas horas de haber llegado al hospital, siendo su muerte atribuida a causas naturales
Edda Pujadas
Twitter: @epujadas