El vicepresidente venezolano, Jorge Arreaza, inició hoy una visita oficial de cuatro días a China con varias reuniones en las que ofreció a los líderes políticos y económicos comunistas que Venezuela sea la «puerta de entrada» del país asiático en el Mercosur.
«Tenemos los recursos naturales más importantes de la región a pesar de ser un país no demasiado grande, la más grande reserva petrolífera del mundo y una de las más importantes reservas de gas», destacó Arreaza en su encuentro con el ministro de la Comisión Nacional de Reforma y Desarrollo, el máximo órgano de planificación económica de China.
Arreaza se reunió hoy también con el vicepresidente chino Li Yuanchao y con el presidente del directorio del Banco de Desarrollo de China (principal brazo inversor del gigante asiático en el exterior), Hu Haibang, en una primera jornada de marcado carácter económico.
El vicepresidente venezolano aseguró en las reuniones que China y Venezuela han establecido «una relación modelo para muchos países del mundo y sobre todo de América», relación a la que el fallecido presidente Hugo Chávez «otorgó siempre el máximo nivel de importancia».
«El presidente Nicolás Maduro, como ‘hijo’ y heredero político del presidente Chávez, le otorga igualmente máxima trascendencia», agregó.
El vicepresidente Li, quien recibió a Arreaza con una solemne ceremonia en el exterior del Gran Palacio del Pueblo -que incluyó el paso de revista a tropas chinas- opinó que Maduro «ha tenido un buen comienzo en su Gobierno, tanto en política interna como internacional, con el amplio apoyo del pueblo venezolano».
Li, uno de los primeros mandatarios extranjeros que visitó Venezuela -en mayo- tras el cambio de Gobierno posterior a la muerte de Chávez, aseguró que «bajo la firme construcción del presidente Maduro van a conseguirse mayores éxitos».
La visita de Arreaza a China antecede a la que Maduro hará al país asiático en septiembre, y se produce en un año de intensos intercambios oficiales, poco después del cambio de Gobierno en ambos países.
Pekín y Caracas buscan con ello renovar los lazos contraídos durante la presidencia de Chávez, en la que Caracas estableció un fuerte vínculo comercial con Pekín, diversificando así una economía antes más dependiente de Estados Unidos.
El presidente de la mesa directiva del CDB tradujo hoy en términos monetarios la relación, recordando que en los últimos seis años esa entidad estatal, con creciente presencia en el mundo en desarrollo, ha ofrecido a Venezuela préstamos por un monto superior a los 40.000 millones de dólares.
Esa relación financiera continúa en 2013, ya que sólo en la primera mitad del año «los préstamos ofrecidos por nuestro banco aVenezuela se aproximan a los 14.700 millones de dólares», señaló Hu, quien recordó proyectos de financiación conjunta en el sector petrolífero y las refinerías.
«Venezuela es uno de los países más importantes para nuestra cooperación internacional», añadió el alto cargo del CDB.
Arreaza celebrará mañana un encuentro con el presidente chino, Xi Jinping, y también se reunirá con estudiantes venezolanos que se forman en Pekín en conocimientos de tecnología espacial.
La formación de este grupo de jóvenes forma parte de los acuerdos de cooperación chino-venezolana en materia espacial, coronados en los últimos años por el lanzamiento desde China de los satélites venezolano «Simón Bolívar» (2008) y «Miranda» (2012).
El vicepresidente viajará en el fin de semana a la ciudad de Shanghái, principal centro financiero y comercial de China, donde será recibido por las autoridades locales y visitará la zona económica especial de Pudong, famosa por sus futuristas rascacielos.
EFE