El vicepresidente, Jorge Arreaza, destacó hoy el creciente interés de China por invertir en tierras y en el sector agrícola de Venezuela, durante la segunda jornada de su viaje oficial al país asiático, que incluyó una reunión con el presidente, Xi Jinping.
La cooperación de China con Venezuela, que en los últimos años ha sido especialmente patente en los sectores energético y tecnológico, podría así extenderse a la agricultura y las tierras, declaró a Efe Arreaza.
«Hemos dado una inmensa batalla con inmensas inversiones, pero las cifras indican que estamos aún lejos de garantizar la seguridad y la soberanía alimentaria en nuestro país, y necesitamos por ello alianzas como la que tenemos con China», subrayó el vicepresidente venezolano, en visita oficial al país asiático.
China, que por contra presenta un problema de escasez de tierras -ha de alimentar al 20 por cien de la humanidad con un 7 por ciento de los campos de cultivo del planeta- busca en los últimos años alianzas de este tipo para aumentar su abastecimiento, especialmente en África y Latinoamérica.
Estos movimientos del gigante asiático, que han incluido compras o alquileres de tierras, han hecho que algunas voces hablen de «neocolonialismo» o de la «amenaza china», ante lo que Arreaza fue tajante: «Quienes digan eso es porque tienen un interés muy cercano o muy vinculado con el imperialismo estadounidense».
«Para Estados Unidos, América Latina fue su patio trasero, la utilizaba para llevar adelante sus guerras, para extraer sus recursos naturales», señaló, en este caso en una entrevista para el canal en español de la televisión estatal china CCTV.
«Cuando entra otra potencia del tamaño de China (…) quienes tienen una atadura con el imperio estadounidense entran en pánico, pero para nosotros y para la mayoría de los países de nuestra América es una muy buena noticia», aseguró.
Arreaza también explicó que en su actual visita a Pekín se habló del proyecto de establecer en Venezuela zonas económicas especiales, a la manera de las que China y otros países asiáticos acordaron para estimular su economía (caso de Shenzhen, ciudad construida de la nada en los años 80 y que hoy es el mayor centro tecnológico chino).
«El Gobierno chino no quiere imponer una fórmula sino que quiere que aprendamos de sus errores y sus aciertos, incluso que un equipo venezolano pueda ir al menos a diez zonas económicas en China para definir muy bien nuestra fórmula», explicó el mandatario venezolano.
«China ha entendido la necesidad de que Venezuela pueda desatar todo su potencial», señaló Arreaza, quien mañana viajará a Shanghái, donde conocerá otra de esas zonas de desarrollo económico especial, el barrio de rascacielos de Pudong, y hoy se reunió con el presidente chino.
En este encuentro, mantenido en el Gran Palacio del Pueblo, estuvo muy presente la figura del fallecido líder Hugo Chávez.
«Guardamos una viva memoria sobre la visión, el entusiasmo, la franqueza y el afecto especial que tenía hacia China», destacó el presidente Xi ante los periodistas asistentes al comienzo de la reunión.
Arreaza añadió que Chávez, padre de su esposa (quien le acompaña en la visita), «fue un luchador antiimperialista y siempre admiró que China fuese una potencia, próximamente la primera mundial, que sin embargo establece relación de respeto mutuo, de desarrollo compartido, de paz y de armonía con el resto del mundo».
Durante la visita a Pekín, responsables del brazo inversor chino en el exterior, el Banco de Desarrollo de China, mostraron a Arreaza preocupación por el reciente caso de presunto desfalco en el Fondo Chino-Venezolano, ante lo que el vicepresidente garantizó «blindar todos los procesos y procedimientos en la financiación».
Arreaza señaló que la preocupación china «nos dio la oportunidad de hablar de la batalla que se ha emprendido contra la corrupción en Venezuela», un fenómeno que en su opinión es consecuencia de que en el siglo XX «se impusiera una economía rentista (…), donde no se industrializó el país sino que simplemente la burguesía se aprovechó de ese rentismo». EFE