Y Dios, le contestó a Moisés al ver que la zarza ardía y no se quemaba “Soy El que soy”, en la traducción latina “ego sum qui sum”, pero en la interpretación teológica y hasta libre: “soy el Dios de Abraham y de todos…soy El que soy”…Dios del judaísmo, del islamismo, del cristianismo y de todas la religiones.
Quo Vadis, domine ( a dónde vas, Señor ), palabras pronunciadas por Pedro huyendo de la persecución a los cristianos por Nerón…y Jesús, le respondió voy a ser crucificado nuevamente porque abandonaste al pueblo y le increpó que regresara a Roma. Pedro, fue el primer Papa.
El nombre de PAPA proviene de acrónimo del latín “Petrus Apostulus Potestatem Accipiens” ( el que sucede al apóstol Pedro ).
No hay duda alguna que el Papa Juan XXIII, ( el Papa Buono ), marcó un hito en el cristianismo del siglo XX. Sus encíclicas “Mater et Magistra” ( 1961) y “Pacem in Terris” ( 1963) , abrieron el norte del cristianismo, pero su obra fundamental fue la convocatoria al Concilio Vaticano II. Siguiendo el camino trillado por Juan XXIII, su sucesor Juan Pablo II, (el Papa viajero), rompió las cadenas conservatistas del Vaticano y se movilizó por todo el mundo.
Francisco, el Papa de los Pobres, se nutrió de estos dos santos que ha llevado a los altares. Francisco, es el paradigma de las frases “Soy El que soy” y por supuesto de la pregunta de Pedro “a dónde vas. Señor”, al decir, “solo camino con Jesucristo”.
Francisco, el Papa latino-argentino y del mundo, es el Papa de los pobres, de los desamparados, de los olvidados sin que importe su condición social, raza o credo. Es el Papa de los ricos y de los pobres de corazón, de los pobres pero ricos de esperanzas, de todas las razas, de todos los países, del imperialismo y del marxismo, para abrirles la puerta de lo justo, del ideal social sin venganzas, sin odios, sin oro ni riquezas sino con la cruz redentora de la paz.
Sus propósitos y no menos de sus angustias, son los jóvenes y el desempleo. La moral y la pobreza. Ha dicho que “la juventud es la ventana por donde entra el futuro del mundo”. Será su lema en la Jornada Mundial de la Juventud 2013.
Inspirado en Juan XXIII y en Juan Pablo II, tomó el nombre Francisco, el Santo de Asís, por su ejemplo de humildad y de ser “un hombre de contemplación en cristo para sacar a la iglesia hacia las periferias”.
Es la Iglesia de puertas abiertas y especialmente dedicada en abrir senderos de del buen camino a los jóvenes y a los niños desde sus primeros pasos.
San Francisco de Asís, hijo de rico comerciante burgués, renunció su cuna de oro, para vivir en estricta pobreza. Amigo de musulmanes a quienes intentó su conversión al cristianismo con su frase emblemática: “Señor, hazme un instrumento de paz”.
Hoy vemos con fe y esperanza que si puede haber convivencia de paz para vivir en una sociedad justa mediante conciliación y caridad orientada por Francisco, el Papa de los Pobres.
Cesáreo José Espinal Vásquez
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