Delitos de lesa humanidad son las persecuciones contra cualquier población civil por motivos sociales, políticos, raciales, religiosos o culturales, perpetrados por las autoridades de un Estado
Hernán Papaterra e-mail: hpapaterra@yahoo.com
La canallada que día tras día se comete contra la vida y dignidad del todavía prestigioso comisario Iván Simonovis, preso en las cárceles policiaco-militares del país tras los tergiversados y manipulados infaustos sucesos del once de abril de 2002, acusado infundadamente de delitos de lesa humanidad.
Iván Simonovis es uno de los efectivos policiales con más trayectoria nacional e internacional en Venezuela. Mantuvo una extensa actividad como policía en la PTJ, así como en las filas de la Brigada de Asuntos Especiales. Su último desempeño público la de Secretario de Seguridad. Hoy es Iván Simonovis el preso político más emblemático del Gobierno.
Delitos de lesa humanidad son <actos inhumanos cometidos contra la población civil por motivos sociales, políticos, raciales, religiosos o culturales. Se trata de crímenes de especial gravedad, puesto que atentan contra la especie humana… que significa: herir, injuriar, causar daño. [Colombia Nunca Mas Crímenes de Lesa Humanidad. Pág. 89]>.
Delitos de lesa humanidad son las persecuciones contra cualquier población civil por motivos sociales, políticos, raciales, religiosos o culturales, perpetrados por las autoridades de un Estado. Son los cometidos en perjuicio del fallecido Franklin Brito; la todavía enjuiciada juez Afiunim; el sindicalista de Guayana, Rubén González; los ex policías metropolitanos; y, más claramente, Iván Sinonovis.
A última hora del viernes 26 de julio 2013, la esposa de Iván Simonovis, confirmó que él fue operado con éxito de una apendicitis, de la cual existía preocupación por su avanzado deterioro. Deplora -dijo- las «huellas de todo este daño, en la vida de mi familia, de mis hijos». Reclama que «no hay derecho a que un venezolano y a su familia, se le haga pasar por esta situación de tortura psicológica». María Pertiñez de Simonovis solicita nuevamente a la directora de Derechos Fundamentales, tramite la medida humanitaria para el ex inspector de la PTJ, condenado a 30 años de prisión por los sucesos del 11 de abril de 2002.
El nada creador y muy provocador Hugo Chávez, ahora lamentablemente fallecido, en su papel de presidente del país, gustaba de invocar la cárcel y la muerte para los demás. Condenaba la muerte de gente a las que nunca conoció ni por las cuales probablemente nunca nada sintió. Muy lejos estuvo de sus luchas, muy poco cerca estuvo de ellos y sus causas: Alberto Lovera, Alí Primera, Jorge Rodríguez, Ernesto Ché Guevara o Livia Gouverneur, ¿y por qué no?, de Danilo Anderson. Lo patético en él y de sus pretendidos continuadores es que los anonada, les fascina, solicitar la cárcel infamante y lacerante para quienes les adversan y disienten sin haber cometido delito alguno.
Momento de héroes y villanos en tiempo de mediocres. Periodo de bien y del mal. Iván Simonovis no será héroe, pero ¡cómo se les parece!. Los que le mantienen en la cárcel oprobiosa y le torturan, a él y a su familia, ¡cómo son villanos, son verdaderos Guasón!. Por cierto, lo de felonía es por la canallada.
