El Tribunal administrativo de Kassel aceptó las argumentaciones de la defensa, según la cual el hombre pretendió expresar con ese gesto la monstruosidad y los delirios de grandeza de la dictadura nazi
BERLÍN. La justicia alemana absolvió ayer al artista Jonathan Meese de la acusación de usar símbolos anticonstitucionales por haber mostrado el saludo hitleriano en una «performance». El Tribunal administrativo de Kassel (centro del país) aceptó las argumentaciones de la defensa, según la cual el artista pretendió expresar con ese gesto la monstruosidad y los delirios de grandeza de la dictadura nazi.
La acusación había pedido para Meese una sanción de 12.000 euros (16.000 dólares) por exhibir en un acto público la simbología nazi, lo que es un delito en Alemania. El proceso contra el artista, con fama de provocador, se originó a raíz de un debate y «performance» en junio de 2012, organizado por el semanario Der Spiegel bajo el título «Los delirios de grandeza del arte».
Meese mostró ahí por dos veces el saludo hitleriano, lo que está tipificado como delito en el Código Penal alemán. Sus abogados, sin embargo, argumentaron que el gesto está enmarcado dentro de una obra de arte y no dentro de una declaración política.
En ese caso, el uso del saludo nazi estaría protegido por el artículo 5 de la Constitución alemana, que garantiza la libertad del arte. A favor de Meese existía el precedente de un sumario anterior, abierto contra el artista por la fiscalía de Coblenza en 2009 y que acabó sobreseído.
Agencias