La violencia en Egipto golpeaba la industria turística del país, debido a que los gobiernos europeos advirtieron a sus ciudadanos a permanecer lejos de los atractivos de la nación
EL CAIRO. Las protestas de seguidores del presidente depuesto Mohamed Mursi se volvieron violentas en Egipto el viernes, con funcionarios reportando unos 50 muertos en El Cairo y numerosas víctimas fatales en ciudades de todo el país, en medio del llamado de Hermanos Musulmanes a un «Día de la Ira».
El Ejército desplegó docenas de vehículos blindados en las principales calles de la capital luego de que el movimiento Hermanos Musulmanes de Mursi convocara a manifestaciones en todo el país contra la sangrienta represión militar a islamistas.
El Ministerio del Interior dijo que la policía usaría munición real ante cualquiera que atente contra edificios públicos.
Los nuevos episodios de violencia se producen luego de que cientos de personas murieron y miles más resultaron heridas el miércoles cuando las fuerzas de seguridad desalojaron dos campamentos de protesta en El Cairo intentando poner fin a la turbulencia desatada tras el derrocamiento militar el 3 de julio del primer presidente democráticamente electo del país.
En El Cairo, los disparos se oían en toda la enorme plaza Ramsés, punto central de las protestas de Hermanos Musulmanes en la capital, mientras la policía lanzaba gases lacrimógenos.
Un testigo de Reuters dijo decenas de cuerpos fueron trasladados a una mezquita. Las víctimas tenían heridas de bala. Muchas más personas resultaron heridas por las balas y perdigones en la plaza, agregó el testigo.
En tanto, la televisión mostró imágenes de un hombre armado entre los manifestantes islamistas disparando desde un puente en el centro de la ciudad. Hombres heridos, uno con el pecho ensangrentado, huían en la parte trasera de una camioneta.
Los servicios de emergencia también indicaron que ocho manifestantes murieron en enfrentamientos en la ciudad de Damietta y otras cuatro personas perdieron la vida en la ciudad de Ismailia.
Cinco personas murieron y setenta resultaron heridas en enfrentamientos en la ciudad de Fayoum, al sur de El Cairo, dijo Gamal Shuaib, director del hospital público de Fayoum.
Otros hechos de violencia se reportaron en Alejandría, la segunda ciudad más importante del país, y en Tanta, sobre el Delta del Nilo.
Un oficial de la policía murió en un tiroteo en el norte de la capital, según informó la agencia estatal de noticias MENA.
Cerca del abismo
Profundamente polarizado tras meses de turbulencia política, Egipto está cerca del abismo y sumido en el caos. Los Hermanos Musulmanes y sus seguidores se niegan a aceptar el derrocamiento de Mursi, que los militares perpetraron luego de protestas masivas contra el líder islamista tras un año de Gobierno.
El movimiento islamista reclama la renuncia del comandante del Ejército, el general Abdel Fattah al-Sisi, y la restitución de Mursi, quien está detenido y no ha sido visto en público desde su derrocamiento.
«Tarde o temprano moriré. Mejor morir (luchando) por mis derechos que en mi cama. Las armas ya no me asustan más», dijo Sara Ahmed, una directora de negocios de 28 años, quien se unió a una marcha de miles de manifestantes desde el noreste hacia el centro de El Cairo.
«No se trata de los Hermanos Musulmanes, se trata de derechos humanos», expresó Ahmed, una de las pocas mujeres que no llevaba un pañuelo en la cabeza, signo de devoción en las mujeres musulmanas.
Cuando un helicóptero militar sobrevoló a baja altura la plaza Ramsés, los manifestantes sostuvieron zapatos en alto cantando «Traeremos a Sisi al suelo» y «Fuera, fuera, traidor».
Cuando comenzó a escucharse el sonido de los contenedores de gases lacrimógenos cayendo a su alrededor, los manifestantes empezaron a ponerse mascarillas de tipo quirúrgico, máscaras antigás y pañuelos alrededor de sus rostros. Algunos abrían latas de Pepsi sobre sus caras para contrarrestar el gas.
«¡Allahu akbar! (Dios es lo más grande)», coreaba la multitud.
Agencias cancelan
paquetes turísticos
La violencia en Egipto golpeaba la industria turística del país, debido a que los gobiernos europeos advirtieron a sus ciudadanos a permanecer lejos de los atractivos de la nación, lo que llevó a algunos operadores a cancelar sus paquetes a esa nación.
Thomas Cook Germany y TUI Germany, parte de la mayor agencia de viajes de Europa TUI Travel, canceló todos los viajes a Egipto después de que el Ministerio de Relaciones Exteriores de Alemania pidió a los amantes del sol y buceadores europeos evitar viajar a los populares centros turísticos de ese país.
De otro lado y mostrando su descontento con la peor matanza en Egipto en varias generaciones, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dijo el jueves que la cooperación normal con El Cairo no podría continuar y canceló unos ejercicios militares con las Fuerzas Armadas egipcias previstos para el próximo mes.
«Deploramos la violencia contra los civiles. Apoyamos los derechos universales esenciales para la dignidad humana, incluyendo el derecho a la protesta pacífica», dijo Obama, en una breve pausa de sus vacaciones para dar su dura respuesta a los acontecimientos en Egipto.
Algunos temen que Egipto esté volviendo a ser el tipo de estado policial que mantuvo a Hosni Mubarak en el poder durante 30 años antes de su caída en 2011, mientras las instituciones de seguridad recuperan confianza y reafirman su control.
Las oraciones de los viernes han resultado ser un momento fértil para las protestas durante más de dos años de disturbios en todo el mundo árabe.
Al convocar al «Día de la Ira», los Hermanos Musulmanes usaron el mismo nombre que se dio al día más violento del alzamiento de 2011 contra el ex presidente Mubarak.
Agencias