Erasmo Escalona, padre de Cristian Erick Escalona, dijo que desde su teléfono escuchó cuando el oficial pedía que no lo mataran porque lo tenía en línea
Los familiares de Cristian Erick Escalona, abatido durante un presunto enfrentamiento con efectivos del Cicpc en la UD1 de Caricuao, desmintieron ayer que el oficial de la Policía de Caracas estuviera involucrado en hechos delictivos.
Su padre, Erasmo Escalona, dijo que estaba en su negocio, una licorería que tiene en Antímano en sociedad con dos de sus hijos, entre ellos Cristian, cuando se produjo el supuesto enfrentamiento. Desde su teléfono escuchó cuando el policía pedía que no lo mataran porque lo tenía en línea.
Esa tarde, Escalona llamó al celular de su hijo, oficial con 9 años de carrera en la Policía de Caracas. Cuando atendió, el joven no le contestó sino que dejó la llamada abierta. “Escuché cuando discutía con los policías, presumo que era con el Cicpc. Él les decía que era policía, que no lo mataran, les pedía que hablaran porque no le decían. Escuché los disparos”, contó.
Durante la llamada que quedó abierta, el comerciante le pasó el teléfono a otro de sus hijos que lo acompañaba para que también escuchara lo que sucedía al otro lado del teléfono.
Cuando pudieron conocer la ubicación del oficial Erick Escalona ya estaba muerto. Fue ingresado al hospital Miguel Pérez Carreño, donde está recluido otro oficial que lo acompañaba y que también está herido. Lo señalan de actuar en complicidad con el abatido.
Erick Escalona era padre de dos niños. Se graduó de TSU en Comercio Exterior y tenía con su padre el negocio de licores. “No tenía necesidad de andar robando ni cobrar para obtener dinero” indicó su padre.
Aunque siempre usaba su moto, el día del tiroteo estaba en compañía de un compañero ahora detenido, por lo que su familia desconoce la versión de que conducían una moto robada.
De acuerdo a la versión del Cicpc, los dos oficiales llegaron a la dirección en Caricuao para cobrar la suma de Bs.F. 50 mil que le estaban cobrando a un escolta de la Nestlé que fue víctima de robo de su moto en San Bernardino.
AA