En virtud de las pruebas presentadas por el Ministerio Público, fue condenado a 30 años de prisión Julio César Aray (38), por su responsabilidad en la muerte de su cónyuge Aurora Carranza (45), ocurrida el 10 de septiembre de 2011, en el caserío Loma de Paso Real, estado Guárico.
El fiscal 23° auxiliar de esa jurisdicción, Carlos Sánchez, ratificó la acusación contra el hombre por la comisión del delito homicidio calificado, previsto y sancionado en el Código Penal, con el agravante establecido en la Ley Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, dado que el hecho ocurrió en el ambiente doméstico y siendo el autor el cónyuge.
También fue condenado por el delito de uso de niños, niñas y adolescentes para delinquir, previsto en la Ley Orgánica para la Protección de Niños, Niñas y Adolescentes, pues obligó a dos muchachos de 13 y 12 años a buscar una carretilla para deshacerse del cadáver de Carranza.
Una vez evaluados los medios de pruebas presentados por el Ministerio Público, el Tribunal 1° de Juicio de Guárico dictó pena máxima para Aray, y fijó como centro de reclusión la Penitenciaria General de Venezuela, ubicada en San Juan de los Morros.
El citado día, durante una discusión con su esposa, el hoy condenado le propinó múltiples heridas con un arma blanca (machete) hasta causarle la muerte.
Posteriormente, colocó a la víctima en un tambor plástico y obligó a dos adolescentes a que buscaran en casa de la vecina una carretilla para deshacerse del cuerpo de Carranza.
Dada la ausencia de la mujer, los familiares de ésta denunciaron su desaparición ante el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalistas (Cicpc).
Luego de varias investigaciones coordinadas por el Ministerio Público, fue hallado el cuerpo de Carranza por funcionarios del Cicpc, cerca de la Carretera Nacional en la parroquia Paso Real de Macaira.
Motivo por el cual, la Fiscalía 8º de esa jurisdicción, solicitó ante el Tribunal 4° de Control del estado Guárico la orden de aprehensión contra Aray.
El 6 de junio de 2012, funcionarios del Cicpc aprehendieron al hoy condenado y lo pusieron a la orden del Ministerio Público.