Activistas humanitarios y familiares de las víctimas del conflicto armado (1960-1996) pidieron hoy justicia por los 45.000 guatemaltecos y extranjeros que fueron víctimas de la represión militar y policial, al conmemorarse el Día Internacional del Desaparecido.
Las organizaciones realizaron en la Plaza de la Constitución, en el Centro Histórico de la capital, una exhibición con fotografías de decenas de desaparecidos.
Entre ellas figuró la de Serge Berten, un seminarista belga de la Congregación del Inmaculado Corazón de María que fue detenido por las fuerzas de seguridad el 14 de enero de 1984 en el municipio sureño de Mixco, y desde entonces se desconoce su paradero.
También la de Edgar Fernando García, un estudiante universitario y dirigente sindical detenido y desaparecido el 18 de febrero de 1984, delito por el que fueron condenados a 40 años de prisión en octubre de 2010 dos antiguos agentes de la extinta Policía Nacional.
En declaraciones a Efe, la dirigente de la Fundación de Detenidos-Desaparecidos de Guatemala (Famdegua), Aura Elena Farfán, recordó que la práctica de las desapariciones forzadas en Guatemala comenzaron en 1966.
Farfán dijo que desde el 15 de mayo de 1984 busca a su hermano Rubén Amilcar, estudiante de la estatal Universidad de San Carlos (Usac) y dirigente sindical, quien fue detenido por las fuerzas de seguridad y hasta hoy no lo ha podido encontrar.
Durante la actividad, en la que los familiares portaron globos blancos en algunos de los cuales se leía «Dónde están nuestros hijos e hijas», los activistas demandaron al Congreso la creación de una Comisión Nacional de Búsqueda de Víctimas de Desaparición Forzada.
La iniciativa para la creación de esa instancia se presentó en 2006 y pese a que ya existe un dictámen favorable, los diputados «no tienen interés de aprobarla», dijo Farfán.
En un comunicado, Famdegua, el Grupo de Apoyo Mutuo (GAM), la Fundación de Antropología Forense de Guatemala (FAFG) y el Centro Internacional para Investigaciones de Derechos Humanos (CIIDH) exhortaron al Organismo Legislativo a incluir en la agenda la iniciativa de Ley 3590 que crea esa comisión.
La mayoría de los 45.000 desaparecidos fueron campesinos, dirigentes sociales, estudiantiles, políticos, religiosos y catedráticos que fueron considerados «enemigos» por el Estado.
Guatemala, según las organizaciones humanitarias, es el país latinoamericano con más casos de desaparecidos.
Agencias