BOGOTA. La Fiscalía colombiana inició un proceso para expropiar una empresa emblemática del extinto cártel de Cali, una cadena de farmacias en la que los narcotraficantes lavaron unos 2.000 millones de dólares, informó el organismo el martes.
El ente investigador pidió a un juez la extinción de dominio de 883 locales y ocho sociedades pertenecientes a la compañía Drogas La Rebaja y una cooperativa, avaluados en 25 millones de dólares.
Las farmacias pertenecieron a los capos del cártel, los hermanos Gilberto y Miguel Rodríguez Orejuela, hasta 1990 cuando traspasaron las acciones a familiares, y en 1996 fueron adquiridas por empleados de la cadena, recordó la Fiscalía en un comunicado.
Los mafiosos fueron extraditados a Estados Unidos en 2004 y 2005, respectivamente, y allí purgan penas de 30 años de cárcel por el envío de cientos de toneladas de cocaína.
«Se pudo establecer que los empleados tenían pleno conocimiento que los bienes tenían origen ilícito y las utilidades seguían siendo entregadas a los testaferros de los hermanos Rodríguez Orejuela», aseguró en rueda de prensa el jefe de la unidad contra el lavado de activos de la Fiscalía, Julián Quintana.
Los jefes de la organización «reconocieron ante una corte en Estados Unidos que lavaron más de 2.000 millones de dólares con estas empresas», agregó.
Además de solicitar la expropiación de las farmacias, la Fiscalía anunció que acusará por blanqueo de dinero a varios parientes de los capos y tres directivos de la cooperativa implicada.
Los cárteles de Cali y Medellín -liderado por el fallecido Pablo Escobar- controlaron el tráfico de cocaína hacia Estados Unidos a partir de los años 1980, y lavaron parte de sus millonarias ganancias en negocios reconocidos.
En 1979, Miguel Rodríguez Orejuela compró el club de fútbol profesional América de Cali, el segundo más laureado de Colombia que salió cuatro veces subcampeón de la Copa Libertadores de América (1985, 1986, 1987 y 1996).
AFP