El principal gremio patronal de Venezuela insistió hoy en que los problemas de abastecimiento e inflación del país son generados por el control estatal de cambio y confió en que un nuevo mecanismo que analiza el Gobierno ayude a bajar la cotización del dólar paralelo, aunque pidió esperar más detalles.
«Los problemas del desabastecimiento y la inflación son la consecuencia de un sistema obsoleto», remarcó Francisco Martínez, primer vicepresidente de Fedecámaras, en una rueda de prensa y en referencia al control estatal de divisas en vigor desde inicios de 2003.
Desde entonces, los empresarios y los particulares acceden a las divisas a través de la Comisión de Administración de Divisas (Cadivi), instancia que las vende con condicionamientos de diversa índole, en cantidades limitadas y tras engorrosos trámites.
Adicionalmente, el Gobierno activó en marzo pasado el Sistema Complementario de Administración de Divisas (Sicad), un sistema de subastas que entrega divisas a una tasa superior a la oficial de 6,3 bolívares por dólar pero inferior a la del mercado paralelo.
Sobre el tercer mecanismo en estudio, el ministro de Finanzas, Nelson Merentes, dijo el lunes que las autoridades no descartan que permita la flotación de la paridad del dólar.
El nuevo sistema, sobre el cual las autoridades financieras y monetarias del Gobierno no han dado detalles ni han fijado fecha para su puesta en funcionamiento, podría ofertar dólares tanto de entes del Estado como de particulares, adelantó Merenetes.
«El Banco Central puede entrar a vender a ese mercado y (también) otras empresas, por ejemplo PDVSA (la estatal Petróleos deVenezuela», añadió.
Además de los mecanismos estatales, los empresarios y los particulares recurren a un ilegal «mercado negro o paralelo», donde en la actualidad la cotización de Cadivi se sextuplica y es la que marca los precios de productos al consumidor, en una espiral de especulación que el Gobierno de Nicolás Maduro combate férreamente.
El vicepresidente de Fedecámaras agregó que los empresarios esperan que con el tercer mecanismo la cotización ilegal baje, pero que antes de pronunciarse apriori «el sector privado espera ver cómo será el mecanismo».
No obstante, subrayó, «la mejor solución» apunta a «una política macroeconómica que permita precios justos y calidad de bienes y servicios», una economía «100 % libre».
«Para nosotros es triste que el Gobierno promueva empresas afuera», manifestó en alusión a las importaciones estatales. EFE